Veracruz, Ver.— “Yo lo oí mejor, bien, me dio tranquilidad. Me dijo que está bien, que ya se van a poder comunicar con nosotros. Me dijo que están en un procedimiento, no entendí bien qué era, pero me pidió que le llevara ropa”, expresó Ana, esposa de uno de los marinos desaparecidos desde el pasado lunes 13 de mayo.

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Los elementos explicaron que están en medio de un proceso en la Secretaría de Marina (Semar), por lo que no pueden salir aún, pero que se encuentran bien.

Ana, quien dio a conocer la situación de los elementos de la Semar, explicó que después de muchas horas de espera se comunicaron con sus familias.

Ella, otras esposas y familiares acudieron al Centro Integral de Seguridad y Justicia, ubicado en la colonia Carranza, en Boca del Río, Veracruz, para dejarles ropa.

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“Me dijo que tenía más de dos días con la misma ropa, entonces, pues me pidió que le llevara, algunos otros también”, expresó.

Afirmó que está agradecida, pues desde que dieron a conocer la situación a medios de comunicación, aparentemente, las autoridades de la Semar les permitieron comunicarse con sus familiares.

“A mí esto ya me deja mucho más tranquila, tenía dos días sin poder dormir, pensando cómo estaría, al menos ahora sé que está bien, y dónde está”, dijo.

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Las esposas y otros familiares de los marinos que laboran en la zona conurbada de Veracruz-Boca del Río dieron a conocer que llevaban dos días sin saber de sus seres queridos, desde la mañana del pasado lunes 13 de mayo perdieron contacto con ellos.

Los familiares pensaron que se trataba de casos individuales hasta que comenzaron a preguntar con otras conocidas y se percataron de que eran varios elementos los que no respondían a los mensajes y llamadas.

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Por este hecho se manifestaron en el Centro Integral de Seguridad y Justicia, ubicado en la colonia Carranza del municipio de Boca del Río, la noche del pasado miércoles 15 de mayo. Indicaron que eran entre 25 a 30 marinos de quienes no sabían nada.

En el lugar les informaron que estaban en una comisión, sin embargo, no les expidieron un documento que diera fe. Los familiares se preocuparon aún más y exigieron saber dónde se encontraban realmente y si estaban bien de salud, ya que seguían sin poder comunicarse o verlos.

Los familiares permanecieron durante horas afuera de las instalaciones del Centro Integral de Seguridad y Justicia para insistir en que les permitieran comunicarse con sus esposos. Finalmente, este jueves 16 de mayo, los familiares y sus seres queridos se pudieron comunicar.