Hidalgotitlán, Ver – Un caballito de madera y un peluche verde eran los juguetes preferidos de la pequeña Roxana de cuatro años, y los mismos que hoy reposan en su féretro; la niña fue asesinada el pasado martes 20 de septiembre por la noche en el municipio de Hidalgotitlán, en el sur de Veracruz, durante una emboscada.

Tal y como se dio a conocer, la menor viajaba con su padre Jorge Vázquez a bordo de una camioneta color negro tipo Ranger, se dirigían a su domicilio ubicado en la congregación de “Los arbolitos”, pero en el camino Arroyo La Palma, fueron interceptados por hombres armados que dispararon en más de treinta ocasiones.

Las balas que aún se observan en la camioneta de Carlos Vázquez, impactaron en tres ocasiones contra la niña que viajaba como copiloto y murió.

“Él fue a reparar una llanta de su maquinaria y cuando ya regresaba lo emboscaron, mi sobrina iba a su lado y tal vez los sicarios no se percataron de la niña que iba durmiendo y por eso la mataron”, expresa el hermano de Jorge.

El ataúd blanco es pequeño pues Roxana apenas cumplió cuatro años y era de baja estatura; es resguardado por cuatro candelabros y una cruz que sostiene una foto de la menor vestida con un atuendo del mismo color.

Alrededor hay rostros de impotencia, rabia y tristeza, pertenecen a tíos, abuelos y vecinos de Roxana que ya cursaba el segundo grado de kínder.

Carlos que sufrió una herida de bala fue atendido en un hospital de Minatitlán, pero fue dado de alta y se debate entre el dolor por la herida y el de perder a su hija.

Roxana era una niña muy amorosa y siempre cuidaba de su hermanita

Carlos y su esposa Miriam se abrazan para consolarse, pero no dan crédito a que su hija mayor murió, incluso no se atreven a dar alguna declaración ante este medio de comunicación, y reciben a sus familiares y amigos que acuden con flores a dar el pésame.

Roxana es velada en la sala del que fuera su hogar, rodeado de vacas, guajalotes y gallinas, pues -eran una familia de rancho y trabajo-.

“Duele mucho joven, no puedo decir nada”, expresa brevemente Miriam y se retira.
En cambio, el hermano de Carlos y tío de Roxana que decidió omitir su identidad expresa su coraje, pues las balas y -desalmados- le arrebataron sus sueños a Roxana de apenas cuatro años.

"Era un ángel esa niña (Roxana) siempre nos recibía con sonrisas y abrazos cuando llegábamos aquí en su casa; con mis hijas jugaba y siempre fue muy respetuosa a su corta edad”, dice su tío

Añade que desde que nació su hermanita, Roxana se dedicó a cuidarla y la llenaba de amor.

El sepelio se extendió durante toda la noche del miércoles 21, y los familiares y amigos continuaban llegando, algunos con flores y coronas, otros con un abrazo de fortaleza para la familia.

”Esperamos que el gobernador cumpla su palabra y detengan a los responsables”

La mañana del miércoles, en Coatzacoalcos, el gobernador de Veracruz Cuitláhuac García Jiménez declaró que ya existe una línea de investigación por este delito y que ya estaban tras los responsables del crimen.

”Esperamos que el gobernador cumpla su palabra y detengan a los responsables”, dice Porfirio García familiar de Jorge quien no duda en declarar ante este hecho.

Afuera del rancho donde es velada Roxana, hay una patrulla con dos elementos de la Policía Estatal resguardando, lo que fue aceptado por la familia.

La banda musical que fue contratada no pudo tocar, pues a la primera pieza Miriam comenzó a sentirse mal de salud, ante el inmenso dolor que le provoca ver a su hija postrada en un ataúd.

Debajo de una carpa instalada afuera de la casa, están varios hombres tomando café y refresco para acompañar a la familia, pues la velada es larga.

“Su padre de la niña y nosotros exigimos que se haga justicia, porque nosotros no somos quienes, para hacer justicia, por eso esperamos que impere la ley y pedimos que se haga por la niña, porque nosotros somos una familia de ganaderos y de trabajo, que no merecíamos este dolor”, expresa Porfirio.

Roxana será sepultada durante el mediodía de este jueves 22 de septiembre en el panteón de la localidad de Sánchez Taboada, en el mismo municipio, junto a sus sueños y alegrías.

fm