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¿Desarrollo o ecocidio? Plaza Imperial desata polémica en Xalapa

  • Carlos Caiceros
Activistas muestran animales rescatados y fallecidos con la construcción de otro centro comercial en Xalapa

Responsables de la nueva Plaza Imperial, impulsada por el empresario y exalcalde de Xalapa, Manuel Fernández Ávila, dicen tener todo en regla para continuar esta obra que está suscitando polémica en la opinión pública: “sin importar envidias y politiquería”, aseguran.

Sin embargo, asociaciones y ambientalistas han revelado afectaciones al ambiente, así como a la fauna silvestre de la zona. Ellos tienen evidencias de ejemplares de distintas especies que han fallecido o que terminaron heridos al arrancar el negocio.

La plaza, que ya tiene confirmada la ubicación de un Chedraui Selecto y de otras franquicias, avanza a paso firme tras el desmonte y la poda de decena de árboles en el terreno situado sobre las calles boulevard Europa y Paseo de Las Palmas, en el fraccionamiento Real del Bosque.

 

 

Por encima de las críticas, el empresario Manuel Fernández Ávila, esposo de Stella Chedraui Obeso, se jacta en redes sociales de que su familia y otros empresarios continúan construyendo lo que consideran “la nueva ciudad” dentro de la capital veracruzana:

“Queridos amigos, nuestro grupo, FERCHE, seguimos invirtiendo en Xalapa, Las Animas, adonde iniciamos hace 50 años y hoy en día, al igual que Guadalajara, Puebla, Monterrey levantamos el reto de mejorar la calidad de vida de mis coterráneos, sin importar envidias y politiquería.

“Hoy, Las Animas, es la nueva ciudad de Xalapa, desarrollada y construida exclusivamente por nosotros y amigos que conocen el prestigio familiar de más de 130 años empresariales (sic)”, escribió en su cuenta de Facebook el expresidente municipal xalapeño de 1986 a 1989.

 

 

Ante esto, activistas para flora y fauna han coincidido en la necesidad de que se muestren públicamente los permisos concedidos a esta empresa por parte de la Secretaría del Medio Ambiente y del Ayuntamiento. Además, advierten que se alistan acciones legales para obligar a una conservación de especies afectadas.

 

MORTANDAD DE ESPECIES

La organización civil “Regalemos un Paraizoo A.C.” fue la primera que puso en el ojo de la opinión pública los daños ocasionados con la construcción de la nueva plaza comercial.

Su presidente, Rafael Bravo, expone que a lo largo de estos últimos días han recabado pruebas fotográficas de diversos casos de animales que fueron atropellados en la zona por la destrucción de su hábitat y especímenes heridos que tuvieron que rescatar.

 

 

El activista proporciona imágenes de aves tapacaminos, búhos, serpientes, tlacuaches, algunos de los cuales fallecieron en el lugar o luego de su rescate. Otros comenzaron a migrar a otras áreas verdes.

Refiere que el año pasado en el área donde se construye la Plaza Imperial rescataron un puercoespín que fue liberado en una Unidad de Manejo Ambiental (UMA), teniendo reportes de presencia de armadillos, zorros, mapaches y ardillas.

En su opinión la fauna del lugar debía haber sido reubicada, pero los empresarios están jugando con la biodiversidad y la naturaleza, por ello señalan que desde el gobierno se debería exigir un plan de manejo real de esta obra para que no se afecte a más seres vivos.

 

 

Bravo cuenta que fueron los propios vecinos los que empezaron a reportar la situación que estaba aconteciendo, destacando que no están en contra del desarrollo urbano, sin embargo, sostienen que debería hacerse respetando a las especies que ahí habitan.

Criticó que los animales son atropellados por la alta velocidad a la que circulan los vehículos y porque éstos buscan un nuevo hábitat, dado que donde vivían “ya no existe”.

Sobre la posición de Manuel Fernández, que considera como un ataque, sentenció que la organización compuesta de jóvenes universitarios no comulga con ningún partido ni hace “politiquería”, como el empresario calificó, sino que quieren que se realice un plan de manejo de las especies.

 

“Que no sean acciones depredadoras, que no sean ambiciosos y lo hagan de una manera responsable, que no sean tan evidentes en su indiferencia y hambre de poder económico; que hagan una remediación a las afectaciones que ya han hecho, que reforesten, no nos apartamos del crecimiento, pero se puede crecer sin destruir”.

 

 

El activista adelantó que se alista una demanda de amparo, así como acciones en instancias como Desarrollo Urbano del Ayuntamiento y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).

Sin embargo, detener la obra no será fácil. El empresario xalapeño es fundador de los sitios de mayor plusvalía en la capital de Veracruz como la zona residencial Ánimas; el condominio Torre Ánimas; del Hotel Fiesta Inn Xalapa, entre otros desarrollos importantes de la ciudad.

Aparte de integrar el Grupo Ferche, Fernández Ávila presume haber participado en la fundación del Centro Comercial Ánimas y promover en la ciudad a empresas como Costco, Sam´s, Home Depot, California, Office Max, Superama, Portón, Offix, Cinemark, Chedraui y Cafetería Don Justo.

 

CIUDAD CRECE SOBRE BOSQUE, ALERTAN

Respecto a la flora y fauna que se ha destruido, Guillermo Rodríguez Curiel como integrante de La Asamblea Veracruzana de Iniciativas y Defensa Ambiental (LAVIDA), lamenta que la expansión de la ciudad se esté dando sobre áreas de bosque mesófilo, pues hay una cantidad de insectos y aves que se quedan sin un sitio donde guarecerse, máxime que sea la familia Fernández Chedraui la que estaría detrás de distintos proyectos y urbanizaciones.

El activista agrega que si bien es cierto que los terrenos pueden usarse para lo que disponga el propietario, también lo es que tanto el gobierno municipal como estatal no han hecho algo por detener construcciones que causan afectaciones serias a la naturaleza, pero sí conceden los cambios de uso de suelo y el manifiesto de impacto ambiental.

 

 

“Son terrenos que tienen mucha biodiversidad y seguramente tenían ya autorizada la obra”, infirió.

 

Rodríguez Curiel lamenta que les haya “pasado de noche” la intención de construir la Plaza Imperial pues no se dieron a conocer los permisos de manera pública, dado que se tienen que establecer condiciones para mitigar el daño que está provocando, sobre todo en una zona tan habitada por especies como tejones, armadillos, aves, insectos y roedores.

“Son perversos los constructores y la inmobiliaria que tienen esa obra porque solo dejaron los árboles que están enfrente y operan como si fuera una pantalla. Si no eres observador, pasas y ves los árboles.

 

“Celebro que la sociedad civil haya colocado esta obra en la opinión pública y ojalá que el gobierno del estado y municipal la clausuren y los obliguen a reparar los daños que ya hicieron; porque ellos gobiernan Xalapa -el grupo detrás de la construcción-”.

 

 

Insistió que hay complicidad en ambos niveles de gobierno, ya que otras construcciones menores siempre son clausuradas cuando aparentemente están provocando daños o no tienen los permisos, pero en este caso no se ha visto una acción porque involucra a uno de los grupos empresariales más fuertes del país.

 

“Los dueños de Xalapa son este grupo y ahora tienen un alcalde (Ricardo Ahued) que forma parte de este grupo, entonces no tienen ninguna dificultad para seguir destruyendo la naturaleza”, acusó Rodríguez Curiel.

 

Por otro lado, Emilio Rodríguez Almazán, del mismo colectivo, critica en entrevista que independientemente de que se realice una conservación o no de las especies, una nueva plaza comercial en esa zona de la ciudad demuestra los intereses económicos que están detrás.

“El propietario piensa en esencia que tiene todo el derecho sobre su propiedad y puede hacer lo que se le plazca siempre y cuando esté en el marco legal y uso de suelo.

 

 

“Sin embargo, los habitantes tienen derechos humanos y derecho a saber qué es lo que está pasando en su barrio, cómo se está pensando este crecimiento, el desarrollo mismo y que no sea guiado por la especulación y los intereses de grupos económicos, sino más bien con un ejercicio más democrático y participativo donde las personas que viven ahí tengan la capacidad de incidir en la manera en que está creciendo su ciudad”.

 

Lamentó que la región sureste de la capital sea la que tenga mayor presión en el crecimiento no solo en la industria inmobiliaria, sino también en la comercial, todo encaminado al consumo de mercancías.

 

“La manera en la que ha crecido ha sido vertiginosa, guiada por las zonas residenciales y el consumo. Sin duda la capital del estado necesita revitalizar la manera en la que ve sus áreas verdes, el tema del archipiélago es muy importante, que son islas de la periferia sin perder de vista los pequeños islotes que quedan y dotan de oxígeno, hábitat para las especies e incluso en recreación”, añadió.

 

TODO EN ORDEN, AFIRMAN

Este medio se trasladó a la obra. Ahí los encargados comentaron que tienen el permiso para movimiento de tierras, un resolutivo de la Procuraduría del Medio Ambiente (PMA) para el manejo de residuos, así como el Manifiesto de impacto ambiental.

Sin embargo, se negaron a brindar una entrevista en forma, aduciendo que son las autoridades las que ya dieron el visto bueno para el proyecto y eventualmente será ante el gobierno que respondan en caso de que sea necesaria alguna aclaración.

Cabe destacar que en esta zona hay una cantidad considerable de plazas comerciales. Tan solo a menos de cuatro kilómetros a la redonda se encuentra Plaza Américas; Plaza Ánimas: Calabria y Ankara, así como la Plaza Monte Magno.

 

 

 

 

 

FP