Veracruz, Ver.- Hace un año, Santa Yáñez Hernández se enfrentaba a dos retos que la pandemia le puso; el primero era sacar adelante su empresa y el segundo cuidar a su familia que se había contagiado de covid.

Santa es fundadora y dueña de la empresa SAIP Soluciones, tras 14 años de esfuerzo en un mercado dominado en su mayoría por hombres, se había posicionado como uno de los principales generadores de proyectos en ingeniería industrial, no solo en el puerto de Veracruz, sino a nivel nacional, pero la pandemia vino a tambalear todo ese esfuerzo.

El impacto económico durante los dos años que estuvieron confinados en sus hogares y el paro de actividades no esenciales, fue uno de los golpes que enfrentó la empresa y las 55 familias que dependen de ella.

"El tema económico nos pegó demasiado, para poder sostener la operación tuve que salir todo el 2021 a buscar créditos, buscar préstamos a altos porcentajes de interés con una expectativa de recuperación a corto plazo que no la tuvimos", contó Santa.

La gestión de préstamos hizo que la empresa se mantuviera a flote durante las épocas más difíciles de la pandemia, gracias a eso logró mantener toda su plantilla laboral.

Pese a que los contratos con sus proveedores se mantuvieron vigentes, tuvieron que realizar ajustes en sus precios y con ello disminuir su cantidad de ingresos.

"Estamos fuertes como empresa, finanzas golpeadas es una realidad, pero fuertes como empresa, como grupo y como gente", mencionó.

A la par que intentaba sacar a flote su empresa, otro reto tomaba fuerza en el interior de su familia. Su mamá y su hijo se habían contagiado de covid.

El primero en contagiarse fue su hijo, que entonces tenía dos años, después su mamá. Ella se encontraba de viaje laboral cuando sucedieron los contagios en su casa y fue la única que no contrajo el virus, por lo que la atención y cuidados recayeron en ella.

"Yo creo que como la carga viral del contagio ya no era tan fuerte, pues yo no me contagié o a lo mejor por la adrenalina de la situación. Dios es perfecto al final, porque si yo me enfermaba, quién nos iba a atender a todos", dijo.

Pese a que tuvo que hacerse cargo de los cuidados de su hijo y su mamá, no descuidó sus labores en su empresa, pues el trabajo era desde casa.

Norma Alicia Ramírez Hinojosa, presidenta estatal electa del Consejo Coordinador de Mujeres Empresarias Veracruz (CCME), señaló que durante la pandemia muchas mujeres desempeñaron hasta triple jornada laboral debido a las medidas de confinamiento; trabajo en la empresa, en casa y como educadoras de sus hijos con las clases en línea.

El artículo "Los roles de género en la brecha salarial", elaborado por Fernanda García, coordinadora de Sociedad Incluyente, indica que las mujeres invirtieron 2.6 veces más tiempo que los hombres en tareas de cuidado no remuneradas, como las tareas del hogar.

Norma Alicia reconoció que, durante el confinamiento de los trabajadores, las mujeres tuvieron una mayor desventaja que los hombres en el ámbito laboral, pues por la carga de trabajo muchas tuvieron que dejar sus empleos para dedicarse al cuidado del hogar.

En el caso de Santa, que es madre soltera, tuvo que desempeñar doble jornada laboral al cuidar de su familia y dirigir su empresa.

"Mi mami falleció el año pasado por covid. Tuvimos una situación grave aquí en casa por el tema del covid, el cual se sumó a los retos que uno va viviendo no como empresario, sino como persona", dijo.

Desigualdad empresarial y brecha de género en pandemia

Deyanira Álvarez Jiménez, quien es directora de la cadena de tintorerías Burbu-Clean, la cual comenzó junto con su esposo hace más de 15 años, mencionó que además de los retos que enfrentó por la pandemia, otro de los problemas que ya existían y que se agudizaron para las mujeres fue dentro del ámbito empresarial y desigualdad en puestos de liderazgo.

Ella es presidenta de la mesa directiva de la Central de Abastos en Veracruz y aunque al inicio comentó que no fue fácil ganarse la confianza de sus compañeros hombres, los resultados que lograron durante su gestión hizo que los demás socios también confiaran en el liderazgo de una mujer.

"Estamos acostumbrados que las cámaras sean lideradas por hombres, entonces cuando ven que una mujer tiene cierta aptitud o cierto carisma, ellos empiezan a bloquearte un poco", comentó.

Durante ocho años ha pertenecido al ámbito empresarial en varias asociaciones y cámaras de empresarios en Veracruz, donde admite que, pese a que en los últimos cinco hubo un cambio considerable, las mujeres aún se encuentran rezagadas.

Esto se nota especialmente en los puestos de liderazgo que ocupan las mujeres dentro de estas asociaciones.

Estas diferencias vinieron a remarcarse durante la pandemia de la covid-19. De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y Caribe (CEPPAL), la pandemia generó un retroceso de más de una década en los niveles de participación laboral de las mujeres.

El estudio "Tendencias en la experiencia del empleado para 2022" de Qualtrics, señala que este año la intención de las mujeres ejecutivas de permanecer en sus empleos actuales se redujo de 86 a 68 por ciento con respecto a 2021.

Tasa de ocupación laboral baja para mujeres en Veracruz

Norma Ramírez señaló que el panorama laboral para las mujeres en pandemia en el país y en el estado no es nada favorable para resarcir la brecha de género que se agudizó.

El documento "Mujeres en la economía en los estados. Marzo 2022", realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), indica que en el periodo del tercer trimestre del 2019 la tasa de ocupación a nivel nacional de las mujeres fue de 45 por ciento.

Esta cifra bajó durante el mismo periodo, pero del 2020 a 40 por ciento, mientras que para el 2021 hubo un aumento de 4.2 por ciento.

En tanto que en el estado de Veracruz, el panorama de ocupación antes de la pandemia era de 10 puntos debajo de la media nacional (35.8 por ciento en tercer trimestre de 2019). Este porcentaje cayó 33.3 por ciento en 2020 y para 2021 solo subió 3.3 por ciento.

"Pese a que en 2021 se recuperó la tasa de ocupación laboral de las mujeres, Veracruz sigue debajo del promedio nacional", destacó Norma Ramírez.

Aunque Santa y Deyanira no pertenecen a este sector de mujeres desocupadas, se tuvieron que enfrentar a los demás problemas que trajo la pandemia; la carga laboral, familiar y la brecha de género en un sector dominado por hombres.

FP