"Este año nos fue como en feria", dice Yuli Alatriste, sus ventas en su tienda de abarrotes disminuyeron 50 por ciento, mientras que durante toda la pandemia de la covid-19 registró la caída de hasta 80  por ciento.

Tras 35 años de existencia, esta es la peor crisis que vive "Abarrotes Lety y Yuli", lo que pone en riesgo el único patrimonio que tiene su familia, la cual trabaja en el negocio.

Ubicada en el mercado Unidad Veracruzana, asegura que derivado de la pandemia los clientes dejaron de acudir al centro de la ciudad, por lo que prefieren ir a supermercados, otro de los golpes que las pequeñas tiendas de abarrotes enfrentan.

"La mercancía ha subido toda, lo que más subió fue el aceite, había uno que lo comprábamos a 16 pesos, el económico de 850 (mililitro), ahorita subió el doble", aseguró.

Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la inflación en México rebasó uno de sus peores aumentos en 20 años, con 7.06 por ciento en la primera mitad de noviembre.

El frijol, el arroz, azúcar, productos indispensables en la canasta básica, subieron alrededor de 20 por ciento.

El frijol que estaba en 14.5, ahora en 22; el arroz estaba en 22.5 y ahora en 38.5; el kilogramo de azúcar estaba en 16.5 ahora está 18.50, según lo detallado por Yuli Alatriste.

Entre los productos que tuvieron un aumento según el Inegi se encuentran: el tomate verde con 42.06 por ciento, electricidad 24.16 por ciento, así como diversos chiles con 19.77.

Además de esos productos, la nuez y la almendra también registraron un alza de 180 el kilo, por lo que Yuli no pronostica buena venta para estos insumos en el mes de diciembre, fecha en la que se consume más por la temporada navideña. 

"Todos se espantan o nos espantamos, la verdad. Porque no nada más son ellos (los clientes), también nosotros". 

Clientes buscan ofertas y precios más bajos

Esta alza de precios afecta a los ciudadanos que se ven obligados a disminuir su consumo, esto a su vez afecta a los pequeños comerciantes como las 'tienditas' de abarrotes en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.

Basilio Morales, empleado de Abarrotes Ramos, ubicado en el Mercado Miguel Hidalgo, aseguró que los clientes cada día buscan precios más baratos, por lo que prefieren irse a otros lados donde vean ofertas más económicas.

"A veces se molestan por los precios. Yo sé que a veces van a los almacenes a comprar, pero no varía mucho el precio. A veces aquí tenemos buenos precios y en los almacenes están un poquito arriba", dijo Basilio Morales.

Cecilia Sánchez,  acude tres veces por semana al mercado en compra de insumos para su taquería, admite que desde hace un año los precios de algunos productos que adquiría se elevaron exponencialmente.

"El tomate de estar en 14 máximo 20, ahora anda 30, 35 (pesos). El chile; los chiles también subieron, la cebolla, el tomate verde el pollo, el ajo, el aceite, la carne, el huevo", dice.

Sin embargo, no puede dejar de comprar o disminuir sus gastos, ya que el negocio que tienen depende de eso, por lo que busca alternativas en precio y materia prima o sustituir el producto por algo más económico.

-¿Logras encontrar cosas más baratas?

"Muy poco, pero algo es algo. Los comercios me imagino también la tienen dura, tener que reducir los costos para que consigan clientes, arriesgan al bajar un poco. Aún que luego ponen ofertas por mayoreo", comentó.

En riesgo tienditas por inflación y pandemia

La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) indicó en México hay más de un millón de tienditas y estimó en octubre que las ventas de estos negocios podían caer hasta en 46 por ciento, esto a causa de la pandemia de la covid.

Aunado a esto se le sumó la inflación, la cual estimo reduciría 16 por ciento más en la compra promedio de los clientes.

La encuesta denominada Ventas vs. Pandemia, realizada por la Anpec y la Universidad Anáhuac, reportó que 20 por ciento de estos negocios podrían cerrar debido a la disminución de ventas.

Lo que ponía en riesgo a dos de cada 10 negocios de este giro, 240 mil tienditas que estarían en riesgo de quiebra de un millón 200 mil  que hay en el país.

Yuli y Basilio forman parte del más de un millón de tiendas que hay en el país, quienes esperan que para el mes de diciembre las ventas mejoren, aunque admiten que no cuentan con muchas esperanzas, pues la inflación y pandemia los tienen en la cuerda floja.