Xalapa.-Por amenazas y agresiones a sus empleados, el Centro de Atención a Clientes de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Coatzacoalcos tuvo que cerrar “hasta nuevo aviso” sus oficinas ubicadas en la zona centro de la ciudad costeña.

Según se confirmó por fuentes que piden anonimato el sábado 30 de marzo fue baleada la vivienda del superintendente, Víctor Saturnino González Aburto. Por los hechos nadie resultó herido.

Este tipo de agresiones comenzaron desde que la empresa productiva del estado intentó empezar a cobrar a morosos en la región.

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Las oficinas fueron cerradas desde el lunes y este martes comenzó a circular una imagen o boletín señalando que no hay una fecha concreta para reanudar el servicio.

Los empleados del Centro de Atención ubicado en la calle Hidalgo, en el centro de la cabecera municipal, explicaron que también han sido intimidados a través de redes sociales.

Por esta razón los encargados de la Comisión consideraron que no es posible continuar laborando bajo estas condiciones.

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Apenas el 19 de junio de 2018 el empleado de la CFE, Nicolás Salomón Palomeque, fue acribillado cerca de dichas oficinas en Coatzacoalcos, a unos metros del patio de suministros.

Hasta el momento no existe un posicionamiento oficial de la Comisión Federal y los afectados señalaron que se analizan otras medidas para cuidar de la integridad de los empleados.

El crimen de Salomón Paloqueme generó la inconformidad de la Sección 53 del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM), quienes incluso marcharon para exigir justicia.

Cabe señalar que Coatzacoalcos ocupa la posición 26 de las 50 ciudades más violentas de Latinoamérica con 48 por ciento de homicidios por cada 100 mil habitantes, según datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.

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