Xalapa, Ver.-Además de irregularidades en el Plan de Emergencia Radiológica Externo (PERE) de la Central Nuclear de Laguna Verde, también se registran incidentes que ponen en riesgo a los trabajadores.

En su número de esta semana la revista Proceso señala que la Central Nuclear Laguna Verde (CNLV) ha ocultado información de incidentes que pusieron en riesgo a sus empleados.

Según dicho medio el 20 de agosto de 2017 durante la recarga de combustible de uno de los reactores a cargo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en el municipio de Alto Lucero, la radiación emitida por tuberías y válvulas afectó a cinco trabajadores.

Dos empleados fueron afectados de gravedad, según el informe de inspección IIIE-01/18-LV01, que señala que los trabajadores descontaminaban equipo en el llamado pozo seco, que se ubica en la vasija que alberga los reactores.

En un acta de hechos la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias (CNSNS) la empleada Luisa Rodríguez Valladares, una de las más afectadas, relató que antes de comenzar a trabajar, el encargado de las tareas les aseguró que los niveles de radiación eran bajos.

Ella pidió mejor equipo que el que les habían entregado, pero se lo negaron porque supuestamente no había riesgo. La medición de radioactividad debía estar por debajo de los 400 milirems (mrem) de dosis acumulada y de mil 500 mrem/hora de rapidez de dosis.

“El mrem mide el efecto de la radiación en el cuerpo, mientras que la rapidez de dosis se refiere a la fracción de rayos absorbidos en determinado lapso”, retoma Proceso.

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Rodríguez Valladares relató que de inmediato mostró su dosímetro al técnico a cargo pues estaba prendida la alarma, pero le respondieron que siguieran trabajando.

Al concluir la actividad y someterse a una medición, Rodríguez reportó niveles de 240 mrem y una rapidez de dosis de siete mil 600 mrem/hr.

De acuerdo con proceso el Reglamento General de Seguridad Radiológica se estipula un límite de dosis efectivo anual para Personal Ocupacionalmente Expuesto de cinco mil mrem”.

De comprobarse esta información incluso podría suspenderse la licencia de operación de la Unidad 1 de Laguna Verde, la cual tiene permiso de operación comercial hasta 2020.

Tras ser evaluada, la trabajadora tomó tres baños helados sin que bajaran los niveles y se tomaron muestras de saliva, fosas nasales y oídos a los cinco expuestos; sin embargo, uno de los jefes de turno de Protección Radiológica, Luis Huesca, ordenó que se tiraran las muestras y retiró al personal afectado “pese al riesgo de contaminación”.

Tres meses después de lo ocurrido, luego de distintas evaluaciones cuyos resultados le ocultaron, el 29 de noviembre de 2017 Rodríguez solicitó a la Dirección General Adjunta de Vigilancia Radiológica, Ambiental, Seguridad Física y Salvaguardias una revisión para descartar contaminación interna con cobalto-58 (Co-58) y cobalto-60 (Co-60), “que emiten rayos gamma, y que en dosis altas son letales”.

De esta forma, el área de Dosimetría de Laguna Verde le confirmó que había absorbido dichos radionúclidos. Un examen posterior constató la presencia de ambos componentes dentro de su cuerpo.

Aunque en un inicio le negaron la información Rodríguez recibió en enero de 2018 sus conteos, que confirmaron la presencia de Co-58 y Co-60, según consta en el oficio AOO.400/040/2018 del 12 de marzo de 2018”, lo que pone en riesgo su salud y su vida.

Solo por este caso, la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear detectó seis violaciones a la Ley Reglamentaria del artículo 27 constitucional sobre materia nuclear, dos al Reglamento General de Seguridad Radiológica, y un incumplimiento de la NOM-008-NUCL-2011 sobre control de la radiación en áreas de trabajo, según el dictamen de inspección del 21 de junio de 2018.

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Cabe señalar que apenas el pasado 29 de enero el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, señaló que pedirá a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) un reporte sobre el estado en el que se encuentran las rutas del Plan de Emergencia Radiológica Externo (PERE) de Laguna Verde.

Esto debido a que un periodista denunció que los caminos de protección de la planta no están a la altura de las circunstancias, y aseguró que hay población que exige una consulta sobre la operación de la planta.

López Obrador respondió que se solicitará a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) un informe detallado para dar a conocer la situación de la planta.

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