Xalapa, Ver.- Aunque los índices de violencia en Veracruz bajaron paulatinamente en comparación con los hechos de inseguridad registrados en los años 2010, 2011 y 2012, el sector empresarial se encuentra preocupado, en alerta y acrecentaron su protección.

En días pasados el director general de la región Sureste de la secretaría de Gobernación, Alberto Amador Leal, presumió que ha habido avances en el combate a la inseguridad por parte de la Secretaría de Marina y Armada de México (Semar), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y las policías estatales al unir esfuerzos, sin embargo el fenómeno de “dispersión” de los grupos delincuenciales “da una sensación de focos rojos”.

Al respecto, el consejero nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Augusto Zamora Lara, consideró que los veracruzanos no deben acostumbrarse a los hechos de inseguridad, porque la violencia no sólo afecta a las células delincuenciales sino a la clase trabajadora.

“No, no, acostumbrarnos nunca, desgraciadamente si existe ese cambio de fenómenos que desgraciadamente nos pega, y le pega a la gente productiva, a la gente que está tratando de hacer las cosas bien, hoy cualquiera que les llena el ojo, lo secuestran, lo levantan, en fin meten a la familia en un estrés”, mencionó.

En el caso de los empresarios, dijo Zamora Lara aumentaron sus mecanismos de protección: “Ya no estamos en ese nivel, ni en esa intensidad del 2010, si disminuyó, pero ahora estamos mucho más en alerta, tener nuestros mecanismos de protección y estar muy alertas”.

Además, dijo que los delitos no sólo permearon en el sector empresarial, los cuales han sido víctimas de secuestros, sino que también afectaron a los empleados de gobierno, como es el caso del jefe de personal del complejo petroquímico Morelos,  Luis Pizarro Sarmiento, que fue asesinado en un establecimiento.

“Esto no sólo se da en la parte privada, con la sociedad civil, sino que se da también con los funcionarios físicos, mataron ni más ni menos que al jefe de recursos humanos del complejo Pajaritos, es algo preocupante”, expresó.

Consideró que ninguno de los tres niveles de gobierno debe buscar una “justificación” a los hechos violentos, porque su deber es dar resultados.

“No debe ser una justificación, desgraciadamente el estado de Tamaulipas volvió a caer e incidir en la violencia e inseguridad eso contamina a Veracruz en el norte y en el sur está el problema terrible de Tabasco, las tomas clandestinas de combustible, desgraciadamente parece un estado sin ley”,  finalizó.

Avc