Treinta y tres jornaleros procedentes de Paso de Ovejas, Veracruz, fueron rescatados el viernes 08 de agosto, en el rancho agrícola El Mimbre, ubicado en la comunidad de Santa Ana, municipio de Vanegas, San Luis Potosí.

Petra Zapata, cuarta visitadora general de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), dijo que al realizar una inspección al rancho, se percataron de que los jornaleros dormían entre pacas de forraje, moscas, ratas y comían en pedazos de plástico.

Además, para dirigirse a sus jornadas, que empezaban a las 7 horas y terminaban a las 19, con una hora para comer, debían caminar casi dos kilómetros. Algunos padecían hambre y estaban enfermos por consumir agua salada.

Se sabe que la CEDH de San Luis Potosí  visitó el rancho el Mimbre, después de que cuatro jóvenes contactaran a sus padres, y les comentaran que vivían en condiciones infrahumanas.

De acuerdo con la visitadora, los empleadores engañaron a los migrantes, quienes quedaron sin empleo al terminar la zafra en Veracruz y aceptaron ir a trabajar a San Luis Potosí.

En Veracruz, al ser contratados,  les prometieron que recibirían 150 pesos por jornada, pero al llegar a San Luis Potosí, les dijeron que les pagarían siete pesos por llenar una cubeta de 19 litros de chile serrano, cuatro por una de chile jalapeño, tres por bote de jitomate y dos por cubeta de chile poblano.

Tras la inspección de la CEDH, los jornaleros recogieron sus pertenencias y salieron a bordo de tres camiones del Ejército Mexicano.

Los migrantes fueron trasladados a un albergue municipal y el sábado partieron a su lugar de origen en un autobús rentado por la alcaldesa de Paso de Ovejas, Rosa Valdez.

La CEDH informó que el caso se turnará a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, así como a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.

Con información de La Jornada