Sucesión: los que la hacen, no la pagan

  • Rafael Arias Hernández

Final a menos de 191 días  y a 13 de elecciones. Inocultable delincuencia electoral y desvío de recursos públicos,  muchos  para carísimo linchamiento mediático del principal opositor.  Más debilitamiento y destrucción de instituciones. Más pobres, hambrientos e inseguros.

LA VIGA EN EL OJO PROPIO

Saben que están obligados a pagar, pero no dejan de saquear, endeudar e intentar privatizar.

¿No qué no deben,  a casi todos?  Tan solo en el caso de la UV. Hasta Gobernador, con el Secretario de Gobierno y  el de Finanzas, en coro o en romántico trío,  llegaron  a negar, importantes cantidades pendientes de pago. Incluso,  se atrevieron a reclamar deudas imaginarias e impuestos supuestamente pendientes. 

Negaron, mintieron, brincaron, patalearon para al final, hacer el ridículo y tener que reconocer que parte de  la deuda pendiente,  tenía a su vez que destinarse al pago, también  pendiente de impuestos federales;  y llego el SAT para salir en la foto y en el pago.

Y claro que siguen debiendo. Por cierto, ¿cuál es el total- total, de la deuda pública estatal, dónde están  inversiones y obras públicas requeridas por la ley?

 Misterio, silencio, verdad a medias y mentira en partes.

¿A dónde ha  ido a parar,  más de un billón de pesos presupuestados en los últimos doce años?

Sin duda una buena parte sigue sin explicación ni justificación. Veracruz no crece y se empobrece. ¿Y los miles de millones de pesos desaparecidos?

Lamentable irresponsabilidad,  ineficiencia y delincuencia de muchos titulares del despacho, sin duda operadores y cómplices, presuntos responsables y prófugos potenciales. ¿Ahora que explicación y justificación tienen los funcionarios aludidos y exhibidos?

Y además, lo que no puede ni debe pasarse por alto. ¿Qué  dicen al respecto los encargados de la supuesta fiscalización  oficial en el estado?

Obviamente que hay responsabilidades y culpabilidades que exigir, tanto a la lavandería de la Contraloría,  como al Órgano de Simulación Superior y  a la omisión (que no comisión),  de vigilancia del Congreso estatal.

¿Para qué sirve su pretensioso  y costoso trabajo?

Hechos  contundentes demuestran  que sirven  para dos cosas, para eso y para nada;  o para encubrir y simular

Respecto a  crisis de instituciones estatales  ¿Quiénes mintieron, mienten y mentirán? ¿Qué del IPE, UV, y  las dependencias gubernamentales  endeudadas, debilitadas y quebradas?

Y hay que insistir. ¿Adónde han ido a para miles de millones de pesos del presupuesto oficial burlado y despojado?

DISTRACCIÓN Y LINCHAMIENTO MEDIÁTICO

No es obligado aceptar y menos justificar, descarado  y ofensivo encubrimiento y protección a responsables y culpables.

Asombra, la convenenciera actitud de algunos profesionales del servilismo y  la abyección que, sin duda, ya son los primeros en el arte de la fuga y  en echarle  la culpa a otros, incluyendo el jefe, sobre todo cuando deja de serlo.

Notorias ineptitud y  complicidad dentro y fuera del gobierno, sobre todo de conocidos políticos y representantes públicos, de padecidos medios y comunicadores mercenarios dedicados a la exaltación y escándalo de otros temas,  al servil linchamiento mediático y a cobrar, bien y con puntualidad,  por sus servicios; pero no a reclamar lo que se ha quitado, quita y se sigue despojando a millones de veracruzanos, cada vez más limitados y sacrificados.

Para no  ir muy lejos, basta dar seguimiento a lo que dicen y, sobre todo a lo que hacen, para comprobar las múltiples formas con las que se prestan a ayudar a desviar la atención; y al final, se desocupan y apoyan a maleantes que hoy, no conformes con ser intocables se reciclan y hasta regresan al lugar del crimen, a un cargo en el gobierno.

Resultando,  que no se logre exigir ni reclamar,  a conocidos y padecidos delincuentes de aquí, ahora  y en el gobierno, para que no sean procesados y castigados. Minimizan  y contribuyen  a distraer y olvidar, para dar continuidad a impunidad.

Vemos lo que queremos ver. Ciegos, sordos y mudos ignoramos,  toda o parte,  de la realidad que se repite y complica.

Pero la culpa no es de la realidad. La responsabilidad es nuestra. Por desinterés o costumbre, ignoramos y desatendemos realidades, deformamos y manipulamos  signos, lenguajes y mensajes que dicen y muestran, de muchas formas, que el o los problemas al no atenderse no se resuelven y, más bien, se complican y crecen, hasta desbordarse y rebasar los conocidos y acostumbrados límites de presencia o tolerancia, hasta convertirse en inocultable e imparable reclamo y justificada inconformidad social. 

Ahora resulta que se esfuman recursos y no pasa nada; pero eso si en la cara y renovada pista del circo de la fiscalización oficial, se anuncian a las fieras de las tijeras del procedimiento administrativo disciplinario, al falso sistema anticorrupción que es, más bien, una nueva versión de  simulación, distorsión y entretenimiento.

OTROS INEPTOS Y CORRUPTOS INTOCABLES

El colmo, abrir la puerta y aprobar procesos llenos de inconsistencias de  simulada transparencia y  fantasiosa rendición de cuentas. O del  tan presumido como anunciado,  tan incompleto como simulador,  nuevo sistema anticorrupción.

No hay profesionalismo  ni responsabilidad en supervisores y controladores.

Preocupa mucho  que los causantes y responsables siguen impunes,  junto con los lavadores y fiscalizadores.

Unos y otros nunca son llamados o requeridos, acerca de las múltiples fallas detectadas, padecidas y hasta denunciadas.

No pasa nada, nadie responde. Todos se hacen los occisos y ausentes. Olvido y conformismo, justificaciones y pretextos, a nadie preocupa y ocupa.

Sorprenden, personajes en puestos claves. Como  “el probo profesional encargado de la lavandería, de incuestionada calidad moral y de sorprendente ética profesional”, de riqueza y conflicto de interés inexplicables; así como  “el minusválido a conveniencia” del órgano de simulación superior quien no ve, ni oye ni atiende, ni encuentra nada, excepto  a los pocos de la morralla que exhibe y dice que castiga; y de los  disque representante populares,  de la omisión de vigilancia del no poder legislativo, mejor ni hablar.

Vigilantes, fiscalizadores, supervisores, revisores, interventores y demasiados encargados de erradicar ineficiencia y delincuencia, simulan,  hacen como que hacen y todo lo permiten. ¿Continuidad o cambio?

*[email protected]:VeracruzHoydeRafaelAriasHdez

 

 

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Rafael Arias Hernández

Actualmente es Investigador del IIESES y maestro de la Facultad de Economía de la UV.

Cuenta con  Licenciatura en Economía, por la Universidad Veracruzana. Obtuvo mención honorífica Cum Laude.  Maestría en Economía con especialización en Desarrollo Regional y sub especialización en Historia del Pensamiento Económico. Salt Lake City, Utah. USA. Diplomado por la U.V. en “Habilidades del Pensamiento”.  Alta Dirección AD2 Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresas. (IPADE). Becario en los programas Lincon-Juárez y LASPAU.  Asesor académico y maestro de Enseñanza Media, Esc. De Bachilleres Noc. “Art. 3º Constitucional”, Xalapa, Ver. Maestro en la Facultad de Economía, y de la Maestría en Desarrollo Regional. Historia Económica, Desarrollo Económico, Desarrollo Regional, Taller de Investigación, Metodología, Habilidades del Pensamiento y otras cátedras. Maestro en “Técnicas de Debate” de la maestría en Acción Política y Administración Pública, de la Universidad Anáhuac. Xalapa, Ver.

Director General Técnico y Secretario General de la Universidad Veracruzana.

En el Gobierno Federal, fue Delegado Estatal de la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial en Veracruz, y Director de Desarrollo Regional en SPP. En el Gobierno del Estado de Veracruz ha sido Asesor Económico, Jefe de Prensa y Comunicación Social, Director General del Instituto Veracruzano de Cultura, Director General de Industria, Comercio y Estadística, Coordinador de Participación Ciudadana, Coordinador Ejecutivo del Comité de Planeación para el Desarrollo (COPLADEVER). SEFIPLAN, (2010)

Miembro de diversas Asociaciones Civiles y ciudadanas, como el Colegio de Urbanistas y Planificadores, el Colegio de Economistas; la Fundación Cambio XXI A. C.; y de la Fundación Colosio A.C. Colaborador de diversas revistas y publicaciones académicas. Articulista de diversos periódicos, y de otros medios de comunicaciones nacionales, estatales y municipales.