Maltrata, Ver.— El hallazgo de un cuerpo en avanzado estado de putrefacción y parcialmente devorado por la fauna silvestre provocó una intensa movilización policial la tarde de este domingo en el municipio de Maltrata.

Los restos humanos, que fueron localizados en un terreno baldío de la colonia Heriberto Jara Corona, presentaban signos de violencia y estaban acompañados por una cartulina con mensajes intimidatorios, lo que apunta a un posible ajuste de cuentas entre grupos delictivos que operan en la zona centro de Veracruz.

Fueron los propios vecinos de la zona quienes reportaron el hallazgo a las autoridades tras detectar olores fétidos provenientes de la maleza. Al arribar al sitio, elementos de la Policía Municipal confirmaron que se trataba de un cuerpo humano cuya identidad no ha podido ser establecida debido al avanzado grado de descomposición.

La zona de Maltrata quedó bajo resguardo de la Guardia Nacional y la Policía Estatal, mientras se esperaba el arribo de los peritos ministeriales.

Indicios y escena del crimen

Durante las diligencias en el predio de Maltrata, los peritos criminalistas detectaron que el cuerpo había sido presa de aves de rapiña, lo que dejó expuestos fragmentos óseos. No obstante, el hallazgo más relevante para la línea de investigación fue la presencia de una cartulina fluorescente con amenazas firmadas por una célula criminal.

Las autoridades procedieron a asegurar el indicio para integrarlo a la carpeta de investigación correspondiente y tratar de esclarecer los motivos del ataque.

La complejidad para identificar el cuerpo ha obligado a las autoridades de la Fiscalía Regional a ampliar el radio de búsqueda de indicios en el terreno. Por la ubicación geográfica de Maltrata, un punto de paso estratégico, no se descarta que la víctima pudiera proceder de municipios aledaños. Tras el levantamiento, el hallazgo fue trasladado bajo un fuerte operativo de seguridad para los estudios forenses de rigor.

Identificación genética en proceso

Finalmente, los restos del cuerpo fueron enviados al Centro de Identificación Genética Forense de Colorines, en Nogales. Debido a que solo se conservan partes de tejido y osamenta, será necesario realizar pruebas de ADN para determinar el sexo, la edad y el nombre del fallecido. Con este nuevo hallazgo, la región de Maltrata se mantiene bajo vigilancia reforzada por parte de las fuerzas federales, quienes continúan con las investigaciones para dar con los responsables de este crimen.