Liliana Gabriela, de 34 años, y Shayla Alejandra, de 40, habrían sido víctimas de agresión sexual antes de ser ejecutadas al interior de un vehículo y abandonadas sobre la carretera Tecamachalco–Quecholac, la mañana del 27 de julio.

De acuerdo con fuentes cercanas al caso, ambas mujeres presentaban mordeduras en distintas partes del cuerpo, así como signos de violación y heridas por disparos de arma de fuego.

Según los testimonios recabados, el día de su desaparición, Liliana salió de su domicilio en el barrio de Ecce-Homo, en Tepeaca, acompañada de su hijo. Ambos se dirigieron a un Oxxo ubicado en Santa Cruz Temilco, donde se encontraron con Shayla.

En ese lugar, Liliana descendió del vehículo, dejando al menor en el interior.

Ante esta situación, su hermano la contactó para preguntarle dónde se encontraba. Ella respondió y compartió su ubicación.

Minutos después, el hermano arribó al sitio y localizó el automóvil, así como a su sobrino, quien le informó que su madre estaba con su amiga, pero al buscarlas, ninguna de las dos se encontraba en el lugar.

Los familiares acudieron a presentar la denuncia correspondiente; sin embargo, se les indicó que debían esperar 24 horas. Ante ello, iniciaron una campaña de búsqueda a través de redes sociales.

La tarde-noche del domingo 27 de julio, el hermano y el padre de Liliana reconocieron su cuerpo. El sepelio se realizó la mañana del martes 29 de julio.

Familiares de ambas víctimas exigen a las autoridades dar con los responsables, para que Liliana y Shayla puedan tener justicia. Las investigaciones sobre el caso continúan.

En vehículo dejan los cadáveres de Liliana y Shayla

Fue alrededor de las 06:00 horas del domingo 27 de julio cuando automovilistas reportaron la presencia de un vehículo Volkswagen Golf, modelo 2014, estacionado en la curva del Salado, con la puerta del conductor abierta.

Elementos de la Policía Estatal acudieron al sitio y confirmaron que en el interior del vehículo se encontraban los cuerpos de dos mujeres con impactos de arma de fuego. Ambas ya no presentaban signos vitales.

Agentes acordonaron la zona y personal de la Fiscalía General del Estado de Puebla realizaron el levantamiento de los cadáveres.