• Ecología

Ya no se puede pescar ni lavar ropa en el río Jamapa: Samuel

  • Carlos Navarrete
En sus 60 años de vida, don Samuel García jamás había visto un nivel tan bajo en el río Jamapa.

En sus 60 años de vida, don Samuel García jamás había visto un nivel tan bajo en el río Jamapa.

Él es vecino de la localidad de Rancho del Padre, en el municipio de Medellín de Bravo, y recuerda que anteriormente los pobladores lavaban ropa y pescaban, sin embargo, en la actualidad es casi imposible llevar a cabo ambos actividades porque la temporada de estiaje, que cada vez es más severa, impactó en el afluente.

Montado en su vieja bicicleta observa con tristeza el estado en el que se encuentra el río cuyo nacimiento se da en la montaña Ciltlaltépetl también conocida como Pico de Orizaba.

Recordó que tenía cinco años cuando conoció por primera vez el río. Su mamá lo llevó para que se distrajera mientras ella lavaba ropa.

“Ahorita está en el nível más bajo de la historia (...) pero de unos 15 años empezó la escasez de agua, hoy creo que es el nivel más bajo que hay”.

Explicó que también los vecinos acostumbran pescar en las aguas del río, pero la actividad se ha visto afectada por el nivel tan bajo y la escasa producción.

En la actualidad, el río -a la altura de la localidad de El Tejar- en Medellín de Bravo, cuenta con una gran cantidad de Lirio. La maleza acuática se convierte en una barrera para el paso de las crías de peces.

El personal de la empresa Grupo Metropolitano de Agua y Saneamiento (MAS) colocó costales de arena para contener el agua y poder bombearla a las plantas potabilizadoras de El Tejar I y II.

“Le pusieron costales para retener tantito el agua porque no han compuesto la represa, dejó de funcionar hace como 30 años y con puros costales se la llevan”, dijo don Samuel.

En un comunicado, la empresa Grupo MAS informó que el nivel del río disminuyó considerablemente, lo que afecta la producción de las Plantas Tejar I y II, responsables de aproximadamente el 35 por ciento del abasto total en la zona conurbada de Veracruz, Boca del Río y Medellín.

La oferta de agua se ha reducido hasta en un 37 por ciento generando baja presión o falta de suministro en diversas zonas de los tres municipios.