Xalapa, Ver.- Pobladores de Lerdo de Tejada denunciaron que nuevamente se encuentran desprotegidos debido a que los elementos de la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y Policía Estatal que blindaron el municipio en el pasado mes de enero, solo estuvieron 20 días.

Lo anterior lo afirmaron familiares de Brando Arellano Cruz, joven que fue asesinado por la Policía Municipal en enero de 2024 y quienes señalaron que en cualquier momento podría ocurrir otra tragedia debido a la ingobernabilidad en el municipio. 

“Nada más fue por dos semanas, ya no hay ese resguardo. Lerdo es una ciudad insegura, llena de impunidad, de injusticias y de atropellos. Si sigue esto así, va a ocurrir lo que ocurrió y quizá cosas peores porque no hay una rienda, no hay quien sustente ese gobierno”, mencionaron Érika María Cruz Hernández y Delfino Arellano.

La madre y padre de Brando Arellano Cruz comparecieron ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción para ratificar una denuncia contra María Esther Arróniz López, síndica en funciones de alcaldesa del ayuntamiento de Lerdo de Tejada, por ejercicio indebido del servicio público. 

Érika María Cruz Hernández y Delfino Arellano, padres de la víctima, señalaron que la seguridad estuvo a cargo de la Guardia Nacional solo 20 días. Otra vez, la seguridad se encuentra en manos de la Policía Municipal de Lerdo de Tejada.

Señaló que esto generó temor entre la ciudadanía de que se repitan los mismos abusos policiales que vivían desde que María Eshter Aroniz López asumió el cargo como síndica en funciones de alcaldesa en 2022. 

Tras el asesinato de Brando Arellano Cruz y la quema de patrullas por los pobladores enardecidos, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez señaló en conferencia de prensa el pasado 22 de enero que la seguridad pasaría a manos de la Guardia Nacional.

Además, el mandatario se comprometió a que pedirían que la síndica con funciones de presidenta municipal, María Esther Arróniz López, se reúna con una comisión de diputados para explicar las medidas que está tomando en el municipio para atender el tema de seguridad. 

Sin embargo, de acuerdo con los pobladores, nada de esto se cumplió y el municipio sigue en la ingobernabilidad. Arróniz López sigue al frente sin ser ratificada.

“Antes de lo que le pasó a mi hijo, los policías cometían abusos a los jóvenes. Les quitaban las billeteras, los celulares, pedían dinero, los golpeaban, los correteaban, ya sea en motocicleta o lo que fuera, para simplemente armarse de sus cosas y no dárselas. 

La gente hizo sus denuncias ante la síndica y esta persona no hizo nada, se tuvo que derramar sangre y desafortunadamente nos tocó a nosotros”, expresó.