Xalapa, Ver.- Los árboles que son cuidados por ambientalistas y vecinos organizados sobre la avenida Lázaro Cárdenas para evitar que sean cortados y, por los que se detuvo la obra de la construcción del puente vehicular en Urban Center, no son endémicos de la región, aseguró el gobernador Cuitláhuac García Jiménez.

De acuerdo con el mandatario estatal, los árboles que fueron derribados en la avenida Lázaro Cárdenas fueron traídos y sembrados sin consultar a expertos en el tema de reforestación, quienes actualmente no recomendarían que fueran sembrados.

Según Cuitláhuac García Jiménez, los árboles son una variedad de una especie de origen australiano. Además, dijo que por ese motivo no es recomendable que se siembren en la región del capital del estado, pues lo ideal sería sembrar plantas nativas.

“Esos árboles no corresponden a la flora nativa, es decir, no son endémicos de la región, son introducidos y los biólogos que se dedican a estas cuestiones forestales saben perfectamente que eso es lo mejor.

El introducir plantas que no son nativas o endémicas puede ser contradictorio contra la intención de arbolar una zona, estas son de Australia; esta variedad es de Australia y fueron ahí colocados sin consultar a los biólogos, que ellos hubieran recomendado no hacerlo, sino hacerlo con plantas nativas”, comentó.

Tras los tres amparos que fueron concedidos a ambientalistas por un juez federal para que la obra fuera suspendida, desde el pasado viernes 21 de julio, el gobernador dijo que ya se encuentran realizando los recursos legales para que la obra se reanude.

Explicó que es importante considerar el interés público de los ciudadanos, quienes se verán beneficiados con este puente, el cual tiene como principal objetivo disminuir el caos vial que hay en la zona en horas pico.

“El interés público es mucho mayor en beneficio de la gente de poner este puente que lo que pudieran hacer algunos árboles que lamentablemente se tienen que tirar”, dijo.

El puente vehicular superior de la avenida Lázaro Cárdenas es parte del Plan B de obras que anunció el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez en la capital del estado, luego de que el proyecto del tren ligero no se llevó a cabo.

Al arrancar el proyecto, 49 árboles fueron derribados con maquinaria pesada, pero ambientalistas se plantaron sobre el camellón de Lázaro Cárdenas para evitar que 10 más fueran derribados.

Desde entonces, mantienen un campamento en la zona y lograron ampararse por la vía federal, por lo que la obra se encuentra detenida. Estos árboles son considerados por ambientalistas como uno de los pocos pulmones que le quedan a la ciudad de Xalapa.