Córdoba, Ver.- Para inhibir las situaciones de violencia generadas por la delincuencia organizada en la zona centro, más de 300 elementos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, llegaron como refuerzos a la policía estatal y municipales, en el marco de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública y la política de “Cero Impunidad”. 

Los uniformados estarán patrullando un extenso corredor que incluye a los municipios de Omealca, Córdoba, Orizaba e Ixtaczoquitlán, con recorridos en zonas consideradas “focos rojos”, implementando puestos de seguridad militar y revisando a toda aquella persona que actúe de manera sospechosa.

Lo anterior, como parte de la Fuerza Tarea Oriente, reveló el coronel de Infantería Diplomado de Estado Mayor, Israel Sámano Figueroa, perteneciente al 63 Batallón de Infantería, de la localidad El Lencero, del municipio de Emiliano Zapata, Veracruz.

“La finalidad es fortalecer el estado de derecho, colaborar con las autoridades en la detención de integrantes de la delincuencia organizada, actuando en todo momento con pleno respeto a los derechos humanos. Esto lo estamos realizando en cuatro municipios que es Córdoba, Orizaba, Ixtaczoquitlán y el municipio de Omealca”, señaló. 

Aseveró que, con la llegada de las fuerzas armadas a la región conurbada Córdoba-Orizaba, buscan inhibir los actos delincuenciales que, han sido recurrentes en esta región de las Altas Montañas, como enfrentamientos y ejecuciones.

“Estamos en apoyo y colaboración con las fuerzas de Seguridad Pública y muy estrecha colaboración, principalmente con la Secretaría de Seguridad Pública del Estado. Este dispositivo consiste en hacer patrullajes, establecer puestos de seguridad militar, revisiones a todo aquello que sea sospechoso o inclusive si nos pide la Fiscalía, llevar a cabo apoyo para cumplimentación de órdenes de aprehensión”, dijo. 

Aseguró que, este tipo de operativos de refuerzo, con elementos de la Guardia Nacional y de la Secretaría de la Defensa Nacional, han dado buenos resultados.