Desde hace dos años, Norma Munguia y Vasthi Flores juegan en el Club Toros Femenil Veracruz, adherido a la Liga Profesional de Futbol Mexicana (LPFM). Ambas comparten la pasión en la cancha y la necesidad de visibilizar este deporte, en su rama femenil, en el estado.

La falta de apoyo y patrocinadores para invertir en el futbol femenil, son los principales obstáculos que enfrentan los clubs en Veracruz.

“Es muy triste ver que el futbol femenil no se apoye como debería. Aquí, en el club Toro estamos trabajando para que las chicas que deseen practicar este deporte puedan tener más oportunidades y un futuro para consolidarse”, dice Norma, delantera de su equipo.

La joven de 25 años dio sus primeros pasos en el futbol a la edad de siete, gran parte de su amor por este deporte proviene de su familia.

Sus tíos y primos fueron su primer equipo; con ellos practicaba en su ciudad natal, Huatusco, ubicada a dos horas y media del puerto de Veracruz. Fue hasta hace dos años cuando pudo competir en torneos profesionales y semiprofesionales.

El Club Toros Femenil Veracruz, le dio la primera oportunidad a Norma de realizar este sueño: competir con otros equipos que, al igual que ella, destaquen y que más mujeres se unan a este deporte.

Vasthi Flores vive la misma situación que sus demás compañeras. Admite que, si bien, en la actualidad existen más posibilidades de que las mujeres participen en torneos amateur y, poco a poco, han ganado terreno en otros estados, en Veracruz el panorama es diferente.

“En Veracruz ha habido ligas de futbol femenil, pero no sobresalen. Se quedan como locales; puede ser porque no hay suficiente apoyo para que salgan a competir a otros lugares”, menciona.

Vasthi juega la posición de lateral izquierda. A los 35 años comenzó a jugar profesionalmente y aunque toda su vida practicó diferentes deportes como el volibol, a los 28 años se decidió por el futbol.

Entre sus triunfos destacan varios torneos estatales con diferentes equipos del estado. Participó en el Torneo Regional La Gloria en 2014; para 2016 fue subcampeona con el club Halcones de Medellín.

También participó en la categoría sub 15 con Tiburones Rojos Femenil, hasta que el equipo fue desafiliado en 2019.

Necesitamos que empresarios volteen a ver el futbol femenil

Víctor Hugo Rocha Mujica, representante legal de Club Toros Veracruz, que tiene a su cargo la segunda división varonil y primera división femenil de la LPFM, señala que decidieron apostarle al futbol femenil para alentar a las veracruzanas a crear una carrera sólida en el futbol.

Hace dos años crearon el Club Toros Femenil Veracruz, desde entonces trabajan arduamente para que el equipo y las chicas logren destacar en los torneos a los que asisten. 

El torneo más reciente en el que participaron fue el de la Liga UPSL MX, donde llegaron a la final nacional.

“Somos la segunda liga a nivel nacional donde participan 10 equipos como Puebla, México, Veracruz y ya con un reglamento avalado por la FIFA a través de una liga en Estados Unidos”, indica.

De acuerdo con Rocha Mujica, uno de los principales obstáculos a los que se enfrentan es la falta de patrocinio. Los inversionistas que deciden apostarle al futbol femenil son pocos por lo que es más costoso mantener a flote a los equipos.

“Estamos tan posicionados en el futbol varonil que todavía no le damos el auge al femenil, aunque hemos tenido grandes partidos en semifinales pasadas, todavía falta al empresario llenarle el ojo para que pueda apoyar al 100 por ciento. Hemos tenido dos o tres apoyos de algunos empresarios que se les agradece y seguiremos convenciendo a más”.

Sin patrocinadores, futbol femenil se juega por amor al arte

Debido a la falta de patrocinadores, las jugadoras no cuentan con un sueldo fijo, solo con el apoyo que el club les da en el traslado cuando van a jugar a otro estado, con la comida y hospedaje, por lo que la mayoría participa por el amor que tienen a este deporte.

De acuerdo con datos de la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) 2018, la brecha salarial en el futbol es una de las más grandes. Pese a que el futbol en América Latina y el Caribe genera más de 500 millones de dólares cada año, 49 por ciento de las jugadoras profesionales no reciben un salario y un 87 por ciento finalizará su carrera deportiva antes de los 25 años.

Norma y Vasthi, dividen su tiempo en entrenar y sus trabajos, ambas cuentan con otras profesiones que les ayudan a solventar sus gastos.

Norma estudió la carrera de Ingeniería Industrial y trabaja ocho horas en el área de administración de un hotel, sus tiempos libres que son en las mañanas los dedica para entrenar y prepararse para los torneos en los que participa.

Vasthi estudió Contabilidad, aunque no ejerce su carrera. Ella participa en otros deportes que la ayudaron a sobresalir y su familia la poya para mantenerse en el futbol.

“Creo que todas las mujeres que nos dedicamos al futbol siempre hemos querido dedicarnos profesionalmente y que sea un trabajo del que podamos vivir, pero a veces las condiciones son pocas. Ahora en el club estamos trabajando para que las niñas que se dediquen a este deporte puedan vivir de esto”, comenta Norma.

Pese a esto, afirman, seguirán en el futbol para que en un futuro las demás niñas puedan obtener más oportunidades y destacar en el futbol femenil.

ys