Debido a la pandemia, la fundación RIHE, asentada en Totutla, enfrenta un momento económico adverso para seguir sosteniendo la ayuda a los 40 niños con distintos síndromes que atiende actualmente, por lo que solicita la solidaridad de la población.

En entrevista la docente de profesión y presidenta de la asociación civil, Sara Hernández Prado, explicó que actualmente ofrecen diversas terapias incluso con caballos que fueron donados, sin embargo, la pandemia causó estragos en los ingresos y a la fecha se deben, entre otras cosas, el sueldo de los cuidadores de los equinos.

Sostuvo que igualmente el material para las terapias y curaciones de los niños se agotó y debe ser repuesto.

La docente precisó que han atendido hasta a 200 niños, pero con la llegada de la pandemia la atención bajó y también se dificulta la posibilidad de continuar la ayuda a menores de escasos recursos en municipios con alto grado de marginación.

Hernández Prado comentó que la contingencia interfirió en las intenciones de construir en forma un centro de rehabilitación que solo se quedó en los cimientos. 

“Los gastos aumentaron antes de la pandemia, no teníamos personas interesadas en ver que teníamos que sostener el edificio, entonces tenemos deudas atrasadas”, acotó.

Hernández Prado detalló que la alcaldesa de Totutla, Nora Acosta, es la que solventa el pago de la renta, pero hacen falta recursos para camas de terapias, pagar el sueldo del cuidador de los caballos, de los terapeutas, neurólogos, maestras, entre otros.

La fundación no solo se ha centrado en niños y adolescentes con diversas discapacidades, como síndrome de Down o diversos tipos de parálisis, sino que se ha extendido a personas en general que han pasado por fracturas en diversas extremidades, e incluso a quienes padecen sordera, de ahí que las necesidades se amplían.

Precisó que ha llevado oficios a los alcaldes de los municipios cercanos para que apoyen, entre otras cosas, con el traslado en las ambulancias a los niños que requieren trasladarse a la asociación para sus terapias, pero no ha tenido respuestas favorables.

Sara, quien es madre de un niño de 13 años con síndrome de Down, criticó que las medidas del gobierno federal sean las de entregar dinero a los padres con niños que tienen diversos padecimientos, pues en muchas ocasiones, los tutores lo que hacen es aplicar ese dinero en otros gastos que nada tienen que ver con el tratamiento de los menores.

“Estos niños necesitan una mejor calidad de vida”, requirió.

Las personas que puedan y deseen donar a Fundación RIHE, pueden hacerlo a través de las cuentas institucionales.

En caso de que no se quiera donar en dinero, sino en especie, RIHE también recibe los apoyos en el número 68 de la carretera Xalapa-Totutla, en dicho municipio.

ys