• Veracruz

Abasto de agua en zona conurbada, en riesgo por estiaje

  • Víctor Toriz
Disminución de hasta el 42% en niveles del río Jamapa también afecta el abasto; pronostican la peor temporada de estiaje en años

Veracruz, Ver.- El nivel del río Jamapa presentan una disminución del 42 por ciento por debajo de su nivel máximo inferior, afirmó el coordinador del programa Salvemos El Pico de Orizaba, Ricardo Rodríguez Demenegui.

El especialista afirmó que esta situación pronóstica la peor temporada de estiaje de la que se tenga memoria para la zona metropolitana de Veracruz para este 2020.

El Jamapa es la principal fuente de abastecimiento para los municipios de Veracruz, Boca del Río y Medellín de Bravo, ya que suministra a 60 por ciento de los usuarios de manera directa.

El resto del suministro es tomado de pozos profundos ubicados en diversos puntos de estos municipios, ya que no existe otra fuente de abastecimiento alterna, ni se cuenta con la capacidad de potabilizar el volumen de agua que es suministrada a través del Jamapa.

En 2019 ya se vivió una situación grave, debido a la baja que presentó este afluente durante los meses de abril a junio, sin embargo, en esta ocasión la baja en el río se registra desde el primer mes del año, aseveró Rodríguez Demenegui.

El problema es generado por la deforestación que existe en el volcán Pico de Orizaba, que es donde se encuentra el glaciar Jamapa.

Sin embargo, la situación actual podría recrudecerse aún más, pues con el inicio de la temporada de incendios forestales, la superficie boscosa podría depredarse más y generar que estos escurrimientos disminuyan, señaló.

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Urgen medidas preventivas

Ricardo Rodríguez Demenegui afirmó que el Pico de Orizaba perdió, en los últimos 25 años, 87 por ciento de la superficie forestal, principalmente por la tala inmoderada, incendios forestales y la falta de acciones de autoridades para fomentar el cuidado y la restauración del ecosistema.

Lo que queda a las autoridades ambientales y agrupaciones de la sociedad civil es ejercer las acciones para que al menos el 14 por ciento de la superficie forestal que se mantiene, pueda conservarse intacta, de lo contrario las consecuencias ambientales serán irreversibles y cada vez más severas.

Una de las primeras secuelas es la falta de agua en municipios ubicados río abajo, en donde se ubican grandes centros urbanos como el del puerto de Veracruz.

“La gente de la zona conurbada sabe de lo que hablo porque es algo que ya están viviendo año con año, sabemos que en promedio los usuarios de la zona conurbada se quedan sin agua 170 y tantos días cada año por el corte del suministro, son días en donde tienen acceso al agua por tandeos, esto será cada vez más constante, no dudamos que este año 2020 se tengan 200 días sin agua para la zona conurbada”, declaró.

En ese sentido, Rodríguez Demenegui señaló que es momento de que se destinen los recursos suficientes para generar las acciones de prevención a incendios forestales que son causados en esta temporada.

Pero al mismo tiempo, señaló que las autoridades de los Ayuntamientos deben asumir el compromiso como propio y aportar los recursos complementarios para acciones de reforestación, considerando los beneficios que reciben de los recursos naturales del volcán, en el caso de la zona conurbada Veracruz, Boca del Río y Medellín el abastecimiento de agua potable.

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MAS y CAB, sin respuesta

Rodríguez Demenegui afirmó que, desde hace 10 años, los ayuntamientos de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río dejaron de realizar aportaciones al programa Salvemos el Pico de Orizaba.

Las autoridades municipales destinaban un porcentaje de los recursos recaudados a los usuarios a través del cobro del agua que realizaba el extinto Sistema de Agua y Saneamiento Metropolitano, para financiar labores de reforestación en el Pico de Orizaba.

Al desintegrar el SAS Metropolitano quedó pendiente de entregar 15 millones de pesos que se cobraron a los usuarios de la zona conurbada en su recibo de agua; del destino del dinero, nunca hubo explicación.

“Son millones de pesos que se quedaron en el aire, dinero que servía para acciones de reforestación, reforestación que le daba empleo temporal a la gente que habita en las comunidades en las faldas del volcán, que les permitía alejarse de actividades ilícitas como la tala clandestina, que también hay que mencionarlo, es una actividad a la que se le orilla a la gente por la falta de oportunidades de empleo”, declaró.

El activista aseguró que se ha buscado reactivar la asignación de estos recursos por parte de las empresas privadas Grupo MAS y la Compañía de Agua de Boca del Río, pero ninguna de las dos ha tenido la voluntad para atender el llamado, a pesar de los beneficios que reciben de los recursos naturales.

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Inviable uso del Cotaxtla

El presidente municipal de Boca del Río, Humberto Alonso Morelli, en una entrevista concedida al periódico Imagen, reconoció que el nivel del río Jamapa se encontraba 50 por ciento por debajo del nivel que tenía el año pasado en la misma fecha.

El edil detalló que se alistaban proyectos de construcción de nuevos pozos de agua para resolver los problemas de abastecimiento que se presentaban en cada temporada de estiaje, pero al mismo tiempo mencionó la intención de retomar la propuesta de construir una planta potabilizadora en el río Cotaxtla.

Ricardo Rodríguez Demenegui afirmó que este proyecto es inviable en tanto no se atienda el problema de fondo, que es el descuido de la fabrica de agua ubicada en el volcán Pico de Orizaba.

El activista recordó que al igual que el río Jamapa, el Cotaxtla recibe sus escurrimientos de la parte alta de la montaña, por lo que las afectaciones causadas en el volcán afectaran el abastecimiento de este río.