El gobierno estadounidense busca dejar sin efecto la ciudadanía de los migrantes que hayan mentido en su solicitud o cometido algún crimen comparando huellas dactilares obtenidas con anterioridad.

De acuerdo con The Washington Post, los investigadores del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos digitalizaron huellas obtenidas en la década de los 90s y estas han sido comparadas con las copias más recientes proporcionadas por personas que solicitan la residencia legal y la ciudadanía en el país.

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De encontrar coincidencias entre aquellas huellas registradas con deportacionescon las de alguien que solicita la naturalización, se llevará a cabo una investigación.

En ese sentido, los infractores podrían ser remitidos a los tribunales federales para que se les niegue la ciudadanía y sean deportados.

Datos de Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) indican que alrededor de 2 mil 536 casos de naturalización derivaron en exhaustivas revisiones, 95 de ellos fueron remitidos al Departamento de Justicia, una cifra que podría elevarse a medida que las autoridades migratorias se hacen con huellasdactilares adicionales.

Esta medida forma parte de la nueva política de Lee Francis Cissna, director de los Servicios de USCIS.

La desnaturalización es una medida que las autoridades de migración reservan para extranjeros que han cometido algún crimen grave o algún fraude; al igual que para quienes consideran una amenaza para la seguridad nacional.

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) cuenta con 315 mil registros antiguos de huellas.