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Despedida con violines para Ida Rodríguez Prampolini

El viernes 4 de agosto se realizará un homenaje en la sede del IVEC, el Ex Convento Betlehemita ubicado en Veracruz.

Música clásica interpretada por una flautista, un pianista y un violinista envolveron el ambiente del funeral de la fundadora del Instituto Veracruzano de Educación y Cultura, Ida Rodríguez Prampolini, que falleció a los 92 años.

Nacida en Veracruz el 24 de septiembre de 1925, fue una mujer apasionada de la cultura, de la lectura y de Veracruz; preocupada por la falta de espacios fundó en 1987 el IVEC, mismo que dirigió hasta 1993.

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El servicio fúnebre se realizó en la funeraria Memorial ubicada en la carretera Playa de Vacas; en el salón Resurrección.

Pasadas las 20 horas del miércoles, comenzaron a llegar amigos de la familia, que ya se encontraba en el lugar desde antes que llegaran los restos de la historiadora.

El féretro de madera, con labrados de la última cena; estaba rodeado de flores, en su mayoría blancas.

Coronas de flores del Instituto Nacional de Bellas Artes, del Instituto Veracruzano de Cultura, del Gobierno del Estado y de compañeros académicos y amigos enmarcaron el lugar en que yacía la historiadora.

El Secretario de Turismo y Cultura de Veracruz, Leopoldo Domínguez Armengual, afirmó que los veracruzanos guardan gran cariño a la labor impulsora de la cultura que hizo Rodríguez Prampolini.

“Se dice fácil, con ella se cerró un ciclo de 57 casas de la cultura, 11 museos, cerca de 12 a 13 bibliotecas municipales”, explicó.

El funcionario estatal reconoció el impulso que Rodríguez Prampolini dio a la expresión artística de Veracruz, sobre todo a los artesanos.

El viernes 4 de agosto se realizará un homenaje en la sede del IVEC, el Ex Convento Betlehemita ubicado en Veracruz de acuerdo con su actual director, Enrique Márquez.

“También se buscará que se haga un homenaje en Bellas Artes, en la ciudad de México (...) ella estuvo en el IVEC hace un año donde se le hizo un homenaje y justamente hace cinco días, el viernes, le dimos reconocimiento en Xalpaa en la feria del libro infantil y juvenil, fueron su hijo y su nieta y nos dijeron que la doctora se sentía bien y agradecida”, dijo.

Márquez afirmó que Rodríguez Prampolini deja un estandarte bastante alto en el tema cultural, artístico y en el desempeño de la docencia.

IDA MURIÓ TRANQUILA

Antes de morir ella recordó a sus hijos, nietos y amigos, además se preguntó por qué la gente decía que ella era importante, recordó Daniel Goeritz Rodríguez, hijo de Ida Rodríguez Prampolini

“Hasta el último momento estuvo lúcida, el día de hoy, estábamos platicando, afortunadamente no sufrió, y se le paró el corazón, ya no aguantó más, pero bueno, siempre dando instrucciones y señales de que debemos salir adelante y de que este país que está de cabeza, no hay más que los propios mexicanos lo enderecen”, afirmó.

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La historiadora dejó dos proyectos en ciernes, uno era un periódico para niños en Veracruz, el otro proyecto era un cuento.

“Quería que lo metiéramos al internet donde ella pudiera tener interlocución con niños y personas que le preguntaran cosas y que los personajes del cuento le fueran contestando estas preguntas, pero también se quedó ahí”, explicó.

Los personajes de la historiadora sí contestaron algunas preguntas, pero se quedó en proceso.

“La educación y la cultura, ella estaba convencida que la educación y la cultura sería lo único que puede salvar a este país y a eso se dedicó toda su vida, empezó a lo mejor en historia del arte contemporáneo, pero se dio cuenta que el artista renombrado y famoso, no es realmente el que importa, sino los mexicanos, los humildes, artesanos, los humildes ciudadanos que necesitan despertar y la única manera de despertar para que este país funcione es a través de la cultura”, comentó.

Aseguró que los primeros libros de la filósofa e historiadora podrían volverse libros de texto gratuitos.

Hasta el momento, no se ha determinado cuál será el sitio de los restos de Rodríguez Prampolini, pues hay varios homenajes en puerta.

ENCUENTRO CON IDA

La habitación de Rodríguez Prampolini hace más de seis años era blanca, de altos techos y llena de luz.

A su avanzada edad ya no podía ver las letras, tenía a alguien afortunado que siempre le leyera, desde obras clásicas hasta los periódicos que diariamente llegaban a su domicilio; ella acostumbraba a escuchar con atención y al término de la lectura hacer algunos comentarios.

Tenía recuerdos de cuando fue reina del carnaval de Veracruz en 1946.

La edad consumió más rápido su cuerpo que su mente, una de las más brillantes de su época; cuando como directora del IVEC le abrió las puertas a los talentos veracruzanos de todas las manifestaciones artísticas.

En noviembre del 2011, Rodríguez Prampolini lideró una de las manifestaciones que se hicieron en contra de la tala de árboles para la ampliación de la avenida Díaz Mirón, que la entonces alcaldesa, Carolina Gudiño Corro concretó, a pesar de las peticiones de la historiadora, que en ese entonces dijo: “La señora (alcaldesa) no ha pedido permisos, de sus pistolas mandó a talar todos los árboles”.

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Desde una de sus grandes ventanas, ella sentía la brisa del mar, escuchaba el romper de las olas en la orilla de la playa y las tormentas cuando estaban sobre la costa, amenazantes.

Sus manos se convirtieron en su guía, cuando estaba todavía de pie, tocaba los muebles a los que ya se había acostumbrado solo como referencia, pero sabía exactamente dónde estaba cada cosa.

Sus perros, enormes labradores, eran sus fieles compañeros, sobre todo una, que en aquel tiempo acababa de dar a luz una camada de cachorritos. La perrita subía hasta lo alto de la vivienda para acompañar a la doctora.

Rodríguez Prampolini sonreía mientras su perrita se echaba a sus pies, mientras continuaba escuchando la lectura que tocaba esa tarde, sus labios dibujaban una tierna sonrisa, mientras se estiraba por una taza de café que le habían llevado para acompañar el atardecer.

Ida fue investigadora Emérita de la UNAM desde hace 29 años, además Premio Nacional Universidad Nacional en 1991, Premio Nacional de Historia, Ciencias Sociales y Filosofía en el 2001, Honoris Causa de la Universidad Veracruzana en el 2003 y Medalla Bellas Artes en 2009.

A través de un comunicado de prensa el IVEC lamentó el fallecimiento de su fundadora, recordándola no sólo como fundadora de esa institución sino del Consejo Veracruzano de Arte Popular, 11 museos, dos escuelas de arte, 12 archivos municipales y 57 casas de Cultura en la entidad.