Coatzacoalcos, Ver.- Casi una hectárea de pantano en la zona conocida como El Roblar, a un costado de la carretera estatal Coatzacoalcos-Minatitlán, se encuentra impregnada de petróleo crudo debido a un derrame registrado en abril de este año. La remediación del sitio podría tardar hasta cuatro meses.

El deterioro de una línea de Petróleos Mexicanos (Pemex) provocó que el hidrocarburo se esparciera en una superficie de aproximadamente nueve mil metros cuadrados, incluyendo un cuerpo de agua de casi tres kilómetros de longitud que llega hasta el río Calzadas.

Con la temporada de lluvias existe la posibilidad de que el combustible llegue hasta el afluente que alimenta a una laguna en la que activistas y autoridades ambientales han confirmado la presencia de manatíes así como otros animales silvestres.

Personal de la empresa OPC trabaja a marchas forzadas para retirar el crudo, que cubrió casi un metro de profundidad en el agua, el cual será devuelto a Pemex. Sin embargo, La remediación del sitio podría tardar hasta cuatro meses.

“Tenemos estimado completar la recolección del producto líquido en 15 días, de ahí lo que seguiría sería empezar a recolectar el material sólido también, eso nos va a tomar más tiempo porque es una etapa complicada, hablamos de unos dos o tres meses”, manifestó un trabajador del lugar.

Según los trabajadores, el derrame fue contenido y no ha puesto en riesgo a ningún animal. “Conocemos el riesgo que tenemos por las lluvias, pero de cualquier manera tenemos técnicas para contener, ahorita lo tenemos dentro de un dique, construimos barreras a lo largo del canal, el resto es por la geología del canal, tenemos barreras marinas para actuar rápido”, detalló el empleado de OPC

La línea en la que se produjo la fuga fue reparada. No obstante, si el petróleo sigue esparciéndose podría haber consecuencias ambientales a largo plazo.

En la zona sur de Veracruz se han registrado por lo menos tres derrames de combustible durante los primeros meses del año.

Además de los hechos acontecidos a un costado de la autopista a Minatitlán, hubo otro suceso en el interior de la refinería Lázaro Cárdenas el pasado cuatro de mayo.

Se trató de un escurrimiento de petróleo en una línea de 18 pulgadas en el área de almacenamiento de la factoría. La línea estaba fuera de operación y fue el remanente de producto empacado el que escurrió impactando una zona de 40 metros

El 11 de abril Pemex reportó un escurrimiento de petróleo en el oleoducto Nuevo Teapa-Venta de Carpio, que afectó un área de 400 metros cuadrados en zona de pantanos en el municipio de Chinameca.