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Último adiós a trabajadores muertos en explosión de Pajaritos

Familiares aseguran que los trabajadores no habían sido capacitados para enfrentar una contingencia de este tipo.

Coatzacoalcos, Ver. Los cuerpos de al menos cuatro personas, se preparan para ser velados en Mundo Nuevo, uno de los sectores que tuvo mayores pérdidas humanas. En ese sitio, se cuentan siete fallecimientos.

Hasta esta tarde, algunos de los cuerpos no habían sido entregados a sus familiares, a pesar de haberlos identificado desde hace más de 24 horas.

En una funeraria del centro de Coatzacoalcos, elementos del cuerpo de bomberos rindieron un homenaje a Fredy Sánchez Lara, quien perteneció a esa dependencia y murió en el cumplimiento de su deber, cuando intentaba rescatar a las víctimas de la explosión.

Ahí, su viuda, Georgina Burelo Rueda, indicó que una vez que se percató de la explosión en Pajaritos inmediatamente marcó a su teléfono celular y en todo momento la llamada fue enviada a buzón.

A partir de eso, el calvario de la búsqueda en hospitales inició, pues recorrió todos los nosocomios de Coatzacoalcos y la región, sin encontrarlo.

Además, dijo, la información que fluía a través de las redes sociales la desconcertaba aun más, ya que su esposo no estaba en ninguna de las listas de lesionados, sino que se mantuvo en todo momento como desaparecido.

“El día de ayer en la mañana mi hermana me apoyó porque ella trabaja en Pemex; logramos entrar, los soldados se pusieron groseros pero al final nos dejaron pasar. Estuve ahí desde las 9 de la mañana hasta casi las 10 de la noche que encontré a mi marido”.

Afirmó que durante el tiempo que estuvo en el complejo, logró ver que eran decenas de cuerpos calcinados y desfigurados los que sacaban de la planta, siendo el de su marido el último, por lo que las labores se detuvieron.

Georgina recuerda a Fredy como una persona entregada siempre a su trabajo, que desarrollo en otros complejos en Minatitlán o en empresas como Braskem, además de haber pertenecido al cuerpo de bomberos de este puerto.

“Fue su pasión, siempre decía que el día que muriera quería que fuera haciendo lo que le gusta, así fue. Y aquí estoy, viuda, pero orgullosa de él”.

Detalló que las versiones de los sobrevivientes indican que su esposo trató de ayudar a un trabajador que se quedó atorado con el arnés, cuando sobrevino la última explosión, por lo que su cuerpo quedó completo.

La mujer reconoció que siempre tuvo problemas con su esposo porque a ella le desesperaba que Fredy se preocupara tanto por las demás personas, pues corría no para salvarse, sino para salvar a los demás.

“Desde el momento que yo no me pude comunicar con él, sabía que no estaba vivo, porque él nunca habría dejado que yo me preocupara. Si estaba herido, iba a buscar la manera de que alguien me lo comunicara”.

Visiblemente tranquila, la mujer confirmó que revisó 20 cuerpos antes de dar con su marido, por lo que la cifra de muertos no es la que dicen las autoridades; dijo que además, el presidente Enrique Peña Nieto, los visito solo “para decir una sarta de tonterías”.