Xalapa, Ver. La delincuencia que se vive actualmente “se le salió de control a las autoridades y ahora no saben qué hacer con ella”, consideró el obispo de la diócesis de Veracruz Felipe Gallardo Martín del Campo.

En entrevista, indicó que la estructura de justicia está por los suelos y fue la autoridad la que permitió que esto llegara al nivel que se vive.

Lamentó que los elementos de seguridad estén entre “la espada y la pared”, bajo amenazas de la delincuencia organizada.

Posteriormente a la misa celebrada por los jóvenes desaparecidos de Tierra Blanca y de otros casos que se han unido a raíz de ventilarse estos casos, el obispo dijo que cuando hay amenazas a las familias de los policías y autoridades no hay escapatoria.

Martín del Campo dijo que “dejaron crecer este problema y ahorita ya no saben cómo pararlo, incluso algunos se coludieron con la droga, con la corrupción y ahorita ya no saben controlarlo”.

La Diócesis de Veracruz, con poco más de dos años oficiando misas por desaparecidos, ha visto, indicó, incrementarse de manera seria el número de familias que deciden hacer públicos sus casos, ya que aún existe temor por la integridad.

Dijo que ante tantos casos que ha conocido, en ocasiones resulta difícil dar palabras de aliento a las personas que lo buscan, aunque nunca han faltado dichas frases de aliento.

Iglesia víctima de la delincuencia

Aseveró que en la diócesis de Veracruz, al menos cinco sacerdotes han sido víctimas de robo y agresiones.

Indicó que en otras parroquias incluso ha habido secuestros y asesinatos, aunque son más frecuentes las extorsiones.