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Marcha del silencio en reclamo de justicia para el caso Narvarte

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Con veladoras y fotografías del periodista Rubén Espinosa, sus colegas recordaron que ya pasó un mes del multi-homicidio

Xalapa, Ver.- En recuerdo del fotoperiodista Rubén Espinosa, sus colegas salieron este lunes a marchar en el primer cuadro de la ciudad. Con veladoras y fotografías de él, recordaron que ya pasó un mes desde que en la colonia Narvarte de la Ciudad de México fueron asesinadas cinco personas sin que hasta el momento haya resultados concretos en las investigaciones.

Un mes transcurrió desde que familiares, amigos y colegas anunciaron desconocer su paradero. Un mes desde que el 31 de agosto se informó sobre el hallazgo de cinco personas muertas en un departamento de una de las colonias de clase media en el Distrito Federal.

Con esa imagen los periodistas, en su mayoría reporteros, caminaron en silencio por las calles de Xalapa y con el luto a cuestas exigieron justicia.

Las veladoras encendidas dieron cuenta del luto pero también de la luz y el reclamo de justicia para Rubén, Nadia Vera, Yesenia Mile y Alejandra, que fueron asesinadas en condiciones que hasta ahora resultan confusas.

Al terminar la caminata todos se repartían las tareas para armar el altar en recuerdo de Rubén; velas, flores blancas, sus fotos, su memoria es lo que esta tarde de lunes recordaron sus amigos de Xalapa. Las escalinatas de la Catedral Metropolitana fueron testigos de la ofrenda que con esmero se formó.

Una de las jóvenes presentes encendía una y otra vez veladoras que por el aire y la lluvia extinguían. Con cuidado las repartía. Una en el centro, otras rodeando sus fotografías, esas en las que se ve el fruto de su trabajo; el manejo de la luz, del color, de las técnicas.

"Te extraño tanto, el simple pensar en tu ausencia me llena de tristeza, pero aquí sigo, queriéndote y peleando por ti y por todos", se lee en uno de los mensajes que escribieron sus amigos. Mientras dos de sus amigas se dividen la labor de mantener encendidas las veladoras.

Ni discursos ni posicionamientos se hicieron esta tarde; simple y llanamente el recuerdo de Rubén Espinosa se hizo presente en el lugar.

Sus amigos, los fotógrafos, se atropellaron por tomar la mejor foto, la que emulara con mayor certeza el cariño con que se reunieron amigos. Hubo cariño, recuerdo y sonrisas, de las que se presentan cuando el recuerdo es mucho mejor al de la realidad. 

Avc