Los teléfonos móviles tienen un amplio mercado en México, de lo cual se aprovechan las compañías para no cumplir con lo que prometen o no proporcionar servicios de calidad, tanto que 50% de las quejas presentadas en la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) tiene que ver con estos problemas.

Ante la  Profeco, la gente se queja debido a que las empresas de telefonía celular abusan con cobros inverosímiles, cargos indebidos y falta de bonificación por la caída de la señal.

La diputada Edith Avilés Cano propuso que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la Profeco supervisen, investiguen y sancionen a estas compañías por las fallas existentes en la red que ofertan y distribuyen.

Es necesario que la Profeco, de acuerdo con su disponibilidad presupuestaria, difunda a través de los medios de comunicación impresos, electrónicos o audiovisuales la Carta de Derechos Mínimos de los Usuarios de Servicios Públicos de Telecomunicaciones.

Este punto legal establece que el proveedor debe cumplir los estándares de calidad determinados por el IFT y bonificar al usuario, si el servicio no se presta conforme a la calidad y condiciones convenidas en el contrato.

También por fallas o cargos indebidos imputables a la compañía, con al menos el 20% del monto del periodo de afectación y del precio del servicio, sin que se presente una reclamación y sin perjuicio de ejercer las acciones legales respectivas para reclamar la indemnización que, en su caso, corresponda por daños y perjuicios.