Xalapa, Ver.- Ya pasaron siete meses desde que la ex secretaria particular de Víctor Molina Dorantes, alcalde de Colipa, presentó ante la Fiscalía General del Estado una denuncia por violación en contra del munícipe y la investigación de los hechos está detenida, sin explicación alguna.

Por si fuera poco esta ama de casa fue amenazada de muerte por el munícipe, razón por la cual pide la intervención del gobernador Javier Duarte de Ochoa, y del fiscal general del estado, Luis Ángel Bravo Contreras, pues refiere que la amenaza se extiende también en contra de su familia.

“Me amenazó a mi esposo, a mi hija y a mí, un tiempo nos fuimos, pero ahora regresé para que esto no se quede así, sobre todo porque hay más personas a las que este hombre ha intentado hacerles lo mismo”.

En rueda de prensa presentó la documentación de la denuncia, con fecha de recibido del 13 de diciembre de 2014, en el Ministerio Público Especializado en Delitos Cometidos por Servidores Públicos, así como en la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delitos de Violencia en contra de las Mujeres y Delitos en Materia de Trata de Personas, además de tener sello de recibido en la Secretaría Privada del Gobernador.

Sin embargo no hay avances en las investigaciones y por el contrario muchas amenazas, como refiere la agraviada: “Quiero que quede algo claro, si algo me llega a pasar a mí, a mi esposo, a mi hija o alguien de mi familia, que caiga todo el peso sobre ese señor, porque he recibido amenazas de las que no se imaginan, desde que ese señor abusó de mi he sufrido como no se imaginan”.

Acompañada por su abogado, la señora relató que a raíz de que su esposo tuvo que irse a trabajar a los Estados Unidos, entró a trabajar como secretaria en el Ayuntamiento de Colipa, como secretaria particular de Molina Dorantes, momento en que comenzó el acoso, culminando con la violación de que fue objeto en el rancho San Francisco, ubicado en el camino a Vega de Alatorre, en el mes de abril del año pasado.

Fue al regreso de su esposo cuando optó por dejar de laborar para el Ayuntamiento, pero guardando secreto de lo sucedido, sin embargo tras ya no presentarse a laborar, policías municipales detuvieron al esposo, siendo puesto a disposición del Ministerio Público, sin cometer delito alguno, por tres días.<br />

Ante estos hechos decidió acudir a las autoridades, pero ya pasaron más de seis meses y sigue estancada la averiguación, refirió el abogado defensor Juan José Segura, “existen todos los elementos necesarios para poder acreditar el delito, sin embargo ya pasaron siete meses y no se ha dado respuesta alguna a la petición de la señora”.

Avc