Emiliano Zapata, Ver.- En una barranca aledaña al basurero de la localidad de Pinoltepec, municipio de Emiliano Zapata, fue hallado el cuerpo de un hombre en estado de putrefacción. Trascendió que la víctima fue ejecutada de un balazo.

En este mismo lugar, la noche del día primero del mes de Abril, fueron hallados dos cuerpos en estado de descomposición y de igual forma presentaban el tiro de gracia.

Fue al filo de las 13:00 horas, cuando fue reportado al número de emergencias 066, una persona muerta en una barranca a orilla del camino a “La Angostura”, ubicada en Pinoltepec y se encuentra aledaño al basurero municipal de Emiliano Zapata.

Según los primeros reportes, fue un grupo de campesinos que al pasar por el mencionado camino, se percataron de un fétido olor que llamó su atención.

Fue entonces que al asomarse hacía la barranca encontraron el cuerpo de una persona, dando aviso de inmediato a la Policía Municipal de Emiliano Zapata, con destacamento en Dos Ríos.

En cuestión de minutos se apersonaron los uniformados, quienes al confirmar la versión de los campesinos, dieron aviso a la Fiscalía General de Estado, acudiendo el perito criminalista Fidencio Mejía Tinoco, de Servicios periciales y agentes de la Policía Ministerial.

El cadáver se encontraba a escasos diez metros de profundidad del barraco, lo que hace suponer a las autoridades que lo arrojaron ahí.

Trascendió que la víctima presentaba el tiro de gracia y tenía aproximadamente tres días de haber muerto. Hasta el momento, se desconoce su identidad y las autoridades revisarían en su lista de personas desaparecidas, si alguna coincide con sus características.

La víctima era de una edad aproximada a los 35 años de edad, de complexión media y vestía camisa a rayas y pantalón de mezclilla azul marino con calzado color negro.

Concluidas las diligencias ministeriales, el cuerpo fue rescatado de la barranca por efectivos de la Policía Municipal de Emiliano Zapata y personal de funerales Godoy, siendo trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo), para practicarle la necropsia de rigor y en espera de que acudan a identificar y reclamar el cuerpo.