Orizaba, Ver.- (AVC) En el segundo día de paro de brazos caídos, más trabajadores de la Jurisdicción Sanitaria número VII, se sumaron al movimiento de protesta mediante el cual exigen diálogo con el secretario de Salud, Fernando Benítez Obeso.

“La situación se torna igual de crítica que cuando estaba Nemi Dib de titular de la Secretaría, esperamos que impere el diálogo y no la cerrazón”, dijo este día José Antonio Medina Fernández, dirigente de la subseccional 4.

Tal como lo habían anunciado, este día se convocó a un mayor número de trabajadores, bajo la advertencia de que continuarán con el movimiento el resto de la semana, llamando cada día a más sindicalizados.

“De momento buscamos no dejar las unidades  médicas, principalmente en zona rural, sin médico; y que las consultas y atención continúen, como hasta hoy, pero si es necesario, todos tendrán que participar en las acciones”, dijo.

Este día, frente al edificio que alberga a la Jurisdicción 7, se registró una mayor presencia de trabajadores, y hay consulta entre ellos, para tomar la decisión de empezar a hacer marchas.

“Si eso ocurre, llamaremos a otras jurisdicciones de la zona, para que vengan a apoyar, como se hizo el año pasado cuando Nemi Dib no quiso dialogar, menos resolver”.

El dirigente de una de las tres subsecciones sindicales que hay en esta Jurisdicción, auguró que este será un año difícil para ellos, debido a que Fernando Benítez Obeso está cayendo en la misma actitud del anterior secretario, y al momento no se ha abierto al diálogo ni a la negociación para buscar mecanismos que respondan a las necesidades del sector salud en Veracruz.

“El diálogo debe ser con nuestra dirigente estatal, María Luisa Soto Maldonado, pero al momento no ha habido acercamiento entre el gobierno y la parte sindical”, dijo Medina Fernández.

De las marchas que podrían empezar a realizar, indicó que personal de la Jurisdicción de Córdoba podría participar en las mismas, a fin de que se unifiquen las voces, pues recordó que allá también viven la misma situación de necesidades añejas que no se han cubierto.

“Eso se va a determinar en junta, se hará consenso entre los compañeros para que aprueben en su caso tomar medidas más drásticas para hacerse escuchar, que serían las marchas además de continuar los paros”, indicó.

Recordó que las necesidades en el caso de la Jurisdicción 7 están relacionados con las malas condiciones de las unidades de salud principalmente en zona indígena, unidades de transporte con problemas mecánicos y eléctricos, falta de medicamentos, de equipamiento, de contratos de energía eléctrica, no pago de salarios y prestaciones en algunas áreas, entre otros.