Córdoba, Ver.- (AVC) “La verdad no peca pero cómo incomoda”, aseguró el padre Lázaro Prado Evangelista ante el reclamo del gobierno federal a comentarios privados hechos por el Papa Francisco y que un amigo hizo públicos.

Sin importar el contexto en que se dio el comentario dentro de una correspondencia personal, en donde el Santo Padre comentaba que temía la “mexicanización de Argentina”, el religioso cordobés expuso que a México le duele la violencia y el “mal” que ha permeado a las instituciones, llámense gobierno, iglesia o escuelas, así como en el seno familiar.

Ante la carta diplomática de protesta enviada al Vaticano por el gobierno de México, explicó que lo más seguro es que el Papa haya dicho esas palabras sin afán de ofender y conociendo su humildad en caso de que lo considere necesario pedirá una disculpa al pueblo de México.

“Si él se equivocó, si las palabras las dijo en un plan por querer ofender, lo más seguro es que se espere una disculpa con toda la humildad y si esas palabras las dijo con toda la verdad, igual el Papa responderá con la verdad, así es que esa carta tendrá una respuesta adecuada”, agregó.

El párroco de la catedral de la Inmaculada Concepción indicó que quienes viven al interior del país tienen una visión de lo que ocurre, mientras que lo que están en el extranjero perciben otra visión y observan los errores, no sólo el Papa, también deportistas, profesionales y grandes personalidades de la política que tienen una opinión de lo que sucede en el país.  

El párroco consideró que los “grandes” esfuerzos pocos o muchos que haga el gobierno mexicano, se quedan cortos porque no se está trabajando al interior de las propias familias.

“Se habla de educación, pero cuando se habla de educación se piensa en computadoras, en las tabletas, cuando se habla de educación sexual se piensa en repartir más condones, eso es simplemente dar más elementos para que se siga mal educando”.

Reiteró que el seno familiar está dañado por la falta de principios, valores, violencia y pérdida de la responsabilidad, lamentablemente ahora se buscan cosas fáciles, uniones desechables, eso permite en el hombre y la mujer que el mal vaya creciendo.

 “Eso cómo se refleja en las muertes, asaltos, toda la situación de inseguridad que vivimos, aquellos hombres y mujeres que andan secuestrando, es el reflejo que pasa en las familias, pasa en todo México, no es exclusivo de un estado”, apuntó.

Por ello insistió en que no se debe olvidar que si se quieren evitar los castigos a los hombres en un futuro, hay que empezar a educar a los niños, a las nuevas generaciones y así no será necesario castigarlos cuando sean grandes.