Poza Rica, Ver.- (AVC)  Luego de una supervisión de autoridades municipales que constataron irregularidades en el mercado “Fidelidad” dentro del terreno del Parador Urbano,  se realizó el desmantelamiento de locales y se clausuraron obras de construcción, en este punto se detectaron algunos espacios ocupados como viviendas y hasta templos Evangélicos.

Personal municipal llevo a cabo el desmantelamiento de más de veinte locales y la clausura de obras de construcción en proceso en dicho mercado que se encuentra en deplorables condiciones y en donde los comerciantes no cuentan con ningún permiso por parte de autoridades locales.

El Presidente Municipal, Sergio Lorenzo Quiroz Cruz y los integrantes de la comuna realizaron un recorrido para constatar las condiciones en que se encuentra el espacio al interior del Parador Urbano, pudieron observar las irregularidades en la que se ha desarrollado y de inmediato ordenaron el desalojo y desmantelamiento de las estructuras, en su mayoría de madera y lámina, aunque algunos estaban en proceso de construcción.

Sergio Lorenzo Quiroz Cruz enfatizó que el objetivo es regularizar dicho espacio que se mantenía en disputa con Petróleos Mexicanos (Pemex) y que con la intervención del Gobierno del Estado se pudo dejar para el municipio.

Resaltó que es necesario entregar el terreno en condiciones óptimas al Gobierno del Estado que posteriormente lo dejará a cargo del Ayuntamiento.

Con uso de maquinaria pesada fueron desmantelados los locales que en su mayoría se mantenían desocupados, aunque en otros se encontraron a familias que tienen meses ocupándolos como viviendas.

Incluso en el interior se localizaron dos templos Evangélicos que también fueron retirados, pues no se cuenta con ninguna autorización para que estos operen.

Las autoridades enfatizaron que los comerciantes deberán acudir ante el Ayuntamiento para regularizar la situación y poder establecer un padrón sobre la actividad comercial que se realiza.

Este operativo tomó por sorpresa a los comerciantes del Parador  Urbano, sobre todo a sus dirigentes que nada pudieron hacer para evitar que se desmantelarán los locales.

Al respecto el dirigente de comerciantes, Miguel Leyton Burgos señaló que no son invasores y fueron reubicados en ese punto desde la administración municipal del ex alcalde Jorge Elías Rodriguez.

Manifestó que aunque no cuentan con certidumbre jurídica sobre los espacios el ex Alcalde, Pablo Anaya Rivera les entregó una “asignación” para poder mantenerse en el sector, siendo en promedio 150 comerciantes trabajando en ese sector.

Recalcó que están dispuestos a atender el requerimiento de las actuales autoridades locales, enfatizando que buscarán el dialogo para que se puedan mejorar las condiciones  en que se encuentran, aunque señaló que no están dispuestos a pagar multas.