• Xalapa

Indignación y lágrimas, tras la eliminación de México en el Mundial

"... se lo dejamos al pinche árbitro lacra", exclamó un aficionado.

“¡Ya que apaguen esa madre”!, exclamó un aficionado mexicano, refiriéndose a la pantalla por la que se transmitió el partido de México contra Holanda, en el parque Juárez, luego de que el equipo tricolor quedara eliminado con el marcador dos a uno.

Caras tristes, lágrimas en los ojos, manos sobre el cabello, fueron las imágenes que se observaban en la explanada del parque Juárez en cientos de aficionados xalapeños, que se dieron cita en ese lugar para disfrutar del partido de octavos de final de la Copa del Mundo Brasil 2014.

Justin, un menor de ocho años de edad que vio el partido de la Selección Azteca en su silla de ruedas, pronosticó un dos a cero a favor de México, con goles del defensa Miguel Layún, aunque su jugador favorito es el capitán Rafa Márquez.

Doña Marcela Hernández, quien acudió al parque público a ver el partido porque en su casa se le fue la luz, también auguraba el mismo marcador. Sus gestos y ademanes fueron uno de los atractivos durante los más de 90 minutos de juego, pues vivió la pasión del futbol al máximo.

“Estoy bien emocionada porque me siento como en familia, todos estamos en familia viendo y esperando que gane México. Tiene que ser dos a cero, ganando México.

Yo vivo solita, y para colmo de malas en mi casa se descompuso la luz, se desconectó un cable y ¡chin!, que me quedo sin luz, y dije, no pues ahora me voy al parque”.

Los chiflidos y las mentadas de madre no cesaron en el Juárez, pues la pantalla que se colocó para transmitir el partido tuvo innumerables fallas tánicas que interrumpían la transmisión y dejaba a los casi 300 aficionados en la incertidumbre de saber qué sucedía en el encuentro.

Afortunadamente esto no ocurrió al minuto 48’, cuando Giovani Dos Santos controló el balón afuera del área grande, condujo un par de metros y sacó un disparo que cruzó al arquero holandés, colocando así el marcador 1-0 a favor de la Selección Azteca.

Niñas, niños, y todos los aficionados en general saltaron al frente de la pantalla para gritar “¡Gooooooooool!” con todas sus fuerzas; las banderas de México comenzaron a hondear, las matracas no dejaban de sonar y los aplausos retumbaban en todo el centro histórico de Xalapa.

La ilusión de calificar a cuartos de final aumentaba con cada llegada del equipo mexicano a la portería holandesa, así como también con las atajadas del arquero Paco Memo Ochoa, quien nuevamente tuvo una actuación que se ganó los aplausos de los xalapeños.

Sin embargo toda esta emoción se vio apagada al minuto 87’, cuando Wesley Snejider prendió el esférico en el aire, luego de un rechace de tiro de esquina, colocando el balón en el fondo de las redes y empatando el juego.

Las porras y las palabras alentadoras por parte de los aficionados no cesaron ahí, pues tenían la esperanza de prolongar el partido a tiempos extra y llevarse la victoria en esa instancia, sin embargo esto no ocurrió, luego de que al minuto 92’ se marcara un penal a favor de Holanda.

Esta decisión arbitral causó gran enojo en los presentes, pues al observar la repetición, la mayoría coincidió en que había sido un “clavado” del delantero Arjen Robben. La indignación aumentó cuando Huntelaar anotó el penal, eliminando así a México del Mundial Brasil 2014.

“El árbitro fue el que nos robó el pase para ir a la siguiente fase, se lo dejamos al pinche árbitro lacra. México fue mejor, fue un robo al cien por ciento, nunca había falta, nunca había nada, nos dejaron afuera por el árbitro”, exclamó un aficionado.

Al final del encuentro, cada familia recogió sus cosas, algunos optaron por quitarse la playera de la Selección Mexicana, otros, con gran orgullo, se la dejaron puesta, pero el sentimiento de tristeza e indignación era por igual, en hombres y mujeres, pequeños y grandes, a todos les dolió la eliminación de México.