La falta de sensibilidad y humanismo que muchos médicos muestran con los pacientes, lo cual genera reclamos por parte de los mismos, se debe a la formación y carga de trabajo inmoderada hacia los residentes, explicó la académica de la Facultad de Medicina y Enfermería de la Universidad Veracruzana, Evangelina Montes Villaseñor.

Previo al inicio de su ponencia "La violencia de género en médicos residentes", como parte del panel 'Violencia de Género y Salud Pública', la especialista en epidemiología explicó que los médicos generan dos tipos de violencia, la física y la emocional, y justificó que es originada por la falta de descanso dentro de sus jornadas de 48 horas de trabajo.

"El factor es la deshumanización de la medicina, de ser un proceso táctico, práctico y académico, pasa a ser un proceso de rigor, de que así se tiene que formar el médico; a mayor vulnerabilidad, a mayor práctica dentro del ámbito hospitalario, pues va a ser mucho mejor tu rendimiento pero no es así".

Sobre ello, dijo que actualmente está comprobado que las residencias médicas son un proceso de formación que va de dos a cuatro años y que las guardias que están estipuladas, deben de ser dos por semana, sin embargo se aplican guardias de castigo, lo que ocasiona que deban vivir prácticamente una semana dentro del nosocomio atendiendo pacientes.

Montes Villaseñor lamentó que, en muchas ocasiones, el paciente se queja por la deficiente atención que recibe de parte del especialista que lo atiende, sin embargo "no se ponen en los zapatos del médico que está formándose, porque también es vulnerable".

"A través de un modelo integral de la salud mental de los universitarios, ver qué herramientas les podemos dar de apoyo, primero para lo que vas a afrontar. La medicina es distinta a las demás disciplinas porque estamos poniendo y generando la salud de un individuo, apoyando para cortar la cadena epidemiológica de la enfermedad. Tenemos que generar líneas políticas y estrategias para el bienestar de nuestros médicos residentes", concluyó.