El crecimiento de la violencia en México en los últimos meses también ha dejado graves consecuencias en los niños y no existe ninguna política de Estado para frenar esto, denunció la Red por los derechos de la Infancia en México (Redim).

Juan Martín Pérez, director ejecutivo de la organización, acusó que los niños cada vez son más blanco de ejecuciones y actos de barbarie.

"Estos casos muestran que hace ya mucho tiempo se perdió cualquier respeto a la vida de un niño, una niña; y, por otra parte, la terrible impunidad: de cada 100 carpetas de investigación donde menores de edad son víctimas de algún delito, sólo una alcanza sentencia condenatoria", apuntó el especialista.

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Tan sólo en 2017 murieron por homicidio 51 bebés menores de un año.

"Hasta 2010 había casos donde los niños estaban en medio de un ataque, en un intercambio de disparos, pero a partir de 2011 con mucha claridad observamos que los niños ya eran blanco de ataques", agregó.

Este fin de semana, dos hechos violentos son ejemplo de la violencia contra menores de edad: el domingo, dos niños, entre ellos un bebé de ocho meses, resultaron heridos en un ataque a balazos contra dos mujeres en el municipio Comalcalco, Tabasco.
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En tanto, el viernes, en el multihomicidio de Minatitlán, Veracruz, murió un bebé de un año, quien fue atacado de manera directa, de acuerdo con los testimonios de los sobrevivientes.

La organización internacional Save The Children reportó que alrededor de 4 de cada 10 niñas, niños y adolescentes declaró que en su comunidad sucedió por lo menos una balacera.
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