• Ecología

La serpiente nocturna de la Isla Clarión

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Identificada, desaparecida y reencontrada.

Una nueva especie de culebra se descubre en la isla mexicana más remota. El redescubrimiento de la culebra nocturna de la Isla Clarión marca todo un acontecimiento ya que no se había registrado desde 1936. En su reencuentro, el reptil se describe como una especie distinta de serpiente endémica de la isla.

La descripción sale a la luz pública a un año de la expedición realizada por los investigadores que redescubrieron la especie entre mayo y junio de 2013 y coincidiendo con la 4ª Semana de la Diversidad Biológica que se celebra en el país del 14 al 25 de mayo de 2014 y que tiene como tema Islas y biodiversidad www.biodiversidad.gob.mx/SDB.

Las islas son el hogar de muchas plantas y animales endémicos, es decir, con distribución restringida a un espacio definido; varias de estas especies están actualmente amenazadas o ya se han extinguido. México posee más de mil islas; entre ellas, un grupo remoto de cuatro pequeños territorios conforman el Archipiélago de Revillagigedo: Isla Socorro, Isla San Benedicto, Isla Clarión y el Islote Roca Partida, pertenecientes al estado de Colima y ubicados entre los 700 y 1100 km de distancia con respecto a las costas en tierra firme.

En 1936, el naturalista americano Charles William Beebe, colectó dentro del área de la Isla Clarión que ocupa 1613 km2, diversos ejemplares de invertebrados marinos, peces, aves y reptiles, los cuales depositó en el Museo Americano de Historia Natural de Nueva York. Uno de los reptiles fue descrito como una subespecie endémica de la isla, la serpiente nocturna Hypsiglena ochrorhyncha unaocularus.

A pesar de las posteriores expediciones realizadas por décadas a la lejana isla, la serpiente nocturna no se volvió a registrar hasta recientemente, después de más de 70 años. La culebra nocturna manchada (Hypsiglena ochrorhyncha) se distribuye desde el centro de California en Estados Unidos hasta la punta de la península de Baja California en nuestro país, pero también habita diversas islas del noroeste mexicano en donde se consideran distintas subespecies. Las culebras nocturnas se alimentan de arañas, alacranes, grillos y de lagartijas y sus huevos.

En la reciente expedición de 2013, los investigadores Juan E. Martínez-Gómez, Gustavo Aguirre-León y Juan A. Cervantes-Pasqualli del Instituto de Ecología A.C. de Xalapa, Ver., México; Daniel G. Mulcahy del Museo Nacional de Historia Natural de Washington, D.C. y un observador del Instituto Oceanográfico del Pacífico de la Secretaría de Marina, encontraron de nuevo a la elusiva culebra.

Además, mediante estudios genéticos, morfológicos y geográficos, los investigadores reconocieron que se trataba de una nueva especie para la ciencia: la culebra nocturna de la Isla Clarión (Hypsiglena unaocularus).

El descubrimiento o redescubrimiento de un animal vertebrado (como los mamíferos, aves, reptiles, anfibios y peces) en este periodo de vida en el planeta, en el que la tasa de extinción de estas especies es alarmante, marca un hecho extraordinario. Las extinciones son consecuencia de la pérdida de hábitat, del calentamiento global, de las enfermedades infecciosas y de la introducción de especies exóticas por los humanos, entre otras causas. En particular, los ecosistemas insulares son sumamente vulnerables a las especies invasoras y a otras perturbaciones del ambiente.

El uso de la ciencia y la tecnología de este siglo, aunque en ocasiones requiere de mayores conocimientos y disponibilidad de infraestructura, sin duda facilita el quehacer científico dentro del sinnúmero de situaciones que se presentan en la labor de identificar una especie o de confirmar su desaparición. El apoyo que representa la información depositada en los centros de investigación, la contenida en los ejemplares de museo, la registrada en lo que parecieran simples notas de campo y la que representan los materiales archivados de expediciones históricas, es invaluable. No obstante, nada sería posible sin el ánimo emprendedor y el rigor científico que acompaña el desempeño de quienes están detrás de los trabajos necesarios para encontrar y reencontrar a una especie.