Heroínas para un presente oscuro

  • Mujeres Que Saben Latín

Por: Harmida Rubio Gutiérrez

La ficción es un reflejo de la vida y la vida un reflejo de la ficción. En el encuentro de las dos cosas se van develando nuevas formas de la naturaleza humana. La historiadora y narradora Johanna Lozoya dice que las historias muestran información muy importante acerca de quien las crea y de quien las consume; así que los personajes y las narraciones nos dejan ver la manera de ser de las sociedades de cada época de la humanidad.

Hoy vivimos tiempos oscuros, el siglo XXI nos envuelve en un gran velo de incertidumbre y violencia. Ya no nos son suficientes los personajes exclusivamente buenos o únicamente malvados, nos parecen sospechosos, ya no nos les creemos. Más bien, deseamos ver  personajes en conflicto interno entre su lado oscuro y el luminoso, con disyuntivas éticas y morales. Actualmente han empezado a surgir personajes femeninos que responden al contexto convulso de los tiempos que corren. Aquí presentamos a tres de ellas, no porque sean un ejemplo a seguir ni porque sean íconos feministas del presente, sino porque nos dicen cosas importantes de la sociedad de hoy y las mujeres. Los tres ejemplos que aquí damos, son de historias que han roto records de audiencia y ventas en televisión, literatura y cine a nivel mundial.

Katniss Everdeen, de la saga de ciencia ficción “Los juegos del hambre”(Lionsgate productions), es una adolescente cazadora que habita una civilización postapocalíptica, que después de enfrentarse a otros chicos y chicas de su edad en un perverso juego de supervivencia, se convierte en una guerrera insurgente que representa al movimiento de rebelión en un mundo oprimido por un poder maquiavélico que juega con el hambre, el miedo y la esperanza de quienes lo habitan. Katniss es certera, elocuente, líder, feroz y dulce al mismo tiempo.

Claire Underwood de la serie House of Cards (Netflix), es una mujer implacable, refinada y muy alejada de la sumisión y abnegación tradicionales para las mujeres; es una prestigiada ambientalista que dirige una ONG y esposa de un político muy importante de los Estados Unidos. Se puede entender la esencia del personaje con sus frases emblemáticas: “¿Soy la clase de enemiga que quieres tener?” o “no me molesta que improvises, pero ojalá lo hicieras mejor”. Claire es estratega, sabe bien lo que quiere y cuando alguien intenta pasarle por encima, le hace ver su suerte de una manera despiadada y elegante.

Teresa Mendoza “La reina del sur” (Telemundo), es una chica mexicana que tiene que emigrar a España y que por una trampa que le tienden acaba en prisión; ahí se hace socia de otra reclusa para iniciar un negocio de tráfico de drogas; después se convierte en una de las narcotraficantes más respetadas de Iberoamérica. Ella es poderosa, ambiciosa y criminal, aunque sigue conservando grandes rasgos de lo que se espera de una mujer, en cuestiones de compasión e instinto maternal.

Estas tres mujeres de la ficción tienen varios rasgos en común. Son mujeres emancipadas, que ya no buscan ser salvadas por un príncipe. Son activas en la historia, se buscan la vida. Viven en mundos donde no cabe el optimismo, a lo responden con inteligencia, valor y algo de esperanza. No son ingenuas, pero son humanas y a veces caen ante el dulce sueño del amor. Sin embargo, a pesar de que estas historias ya no tratan de mujeres tradicionales, sí que ellas siguen cumpliendo con dos mandatos que se nos asignan a las mujeres de todos los tiempos: son bellas y tienen pareja, o al menos se enamoran en alguna parte de la historia. Parece que estas dos características aún no pueden desprenderse de lo que imaginamos como una mujer admirable.

Invitamos a quien lee este texto a que piense en los personajes femeninos de las historias actuales de su preferencia. Que imagine una charla con ellas y les haga preguntas. También podemos cuestionarnos por qué nos gustan tanto esos personajes y eso qué dice de nosotras y nosotros como sociedad. Sería una muy buena noticia que algún día se vaya dejando de lado la búsqueda de la mujer perfecta y se materialicen en la ficción cada vez con más frecuencia, mujeres reales y entrañables.