La mala administración estatal en Veracruz también alcanzó desgraciadamente a la cultura y las artes.

El mayor sueño de muchos jóvenes que estudian música de concierto es formar parte de una orquesta sinfónica.

Quienes consiguen tal logro, emprenden su primera experiencia dentro de una organización musical, que es para ellos como poner a prueba todos sus conocimientos.

Pero todo esfuerzo -sobre todo en la comunidad estudiantil- necesita un estímulo.

Por ese motivo las orquestas sinfónicas, generalmente de cualquier estado o país, reciben a través de las instituciones gubernamentales recursos en apoyo para los músicos en formación.

Esos recursos son dispersos –cada año o ciclo- a los jóvenes que forman parte de las orquestas sinfónicas a través de becas.

Anualmente las instituciones, gobiernos y escuelas música lanzan convocatorias para las audiciones para las audiciones y poder formar parte de dichas agrupaciones sinfónicas.

De esta manera funciona la Orquesta Sinfónica Juvenil del Estado de Veracruz (OSJEV).

Y como el Estado de Veracruz está en quiebra, los jóvenes integrantes de la sinfónica –del ciclo febrero-diciembre 2015- recibieron apenas la segunda quincena de febrero.

El gobierno del estado de Veracruz le debe a más 70 jóvenes músicos sus becas quincenales de marzo a diciembre, hablamos de diez meses.

Lo lamentable aquí es que está por realizarse la selección de músicos para este año 2016, y el estado no ha solventado las becas del 2015.

Cabe destacar que las becas de la OSJEV oscilan desde 10 mil pesos para el concertino, 8 mil para principales de sección, y de 6 mil a 3 mil pesos para fila.

La OSJEV tiene sus orígenes en la Camerata Juvenil de la Secretaría Educación y Cultura (SEC), y que en 1997 se funda como Orquesta Sinfónica Juvenil del Estado de Veracruz (OSJEV), desde entonces es dirigida por el maestro Antonio Tornero.

Desde el año 2011 la OSJEV dejó de ser Organismo Público Descentralizado (OPD) quedando a cargo –su financiamiento- de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV).

De tal modo que los recursos de la sinfónica es un pendiente de la SEV, Secretaría que está señalada por la Auditoria Superior de la Federación (ASF) como una de las dependencias que tiene daño patrimonial.

El gobierno del estado de Veracruz no sólo le queda a deber a un sinnúmero de instituciones, secretarías y proveedores.

Le queda a deber al movimiento juvenil sinfónico veracruzano, que para algunos quizá resulte un sector de poco interés.

Jóvenes músicos de la OSJEV sin recibir diez meses de becas.

No obstante, resulta de vital importancia generar conciencia en las nuevas generaciones sobre la importancia de la música sinfónica y sus valores espirituales.

Proyectos como la OSJEV, no sólo contribuyen a la formación de nuevos músicos, sino también al acercamiento de la sociedad a la música de concierto.

La formación musical y la formación de públicos para el gozo y comprensión de las artes, no puede considerarse una tarea menor, si así lo entiende el Ejecutivo Estatal, sería una percepción muy corta y penosa para un gobernante de un Estado tan grande histórico y culturalmente hablando.