El amor es político

  • Mujeres Que Saben Latín

Sheyla Fuertes Lara

Hablar del amor romántico en el mes de febrero, en que se celebra el día del amor y la amistad nos lleva a diversas opiniones, para la mayoría de las personas significa lo que todos los días nos repite la cultura amorosa y el consumismo: brindar lo mejor de nosotras, nosotros, y quedar bien con la persona amada.

En este espacio hemos tocado en diversas ocasiones el tema de amor romántico, y cómo la cultura patriarcal por años ha reproducido mitos y estereotipos que tanto daño hacen a mujeres y hombres en las relaciones amorosas.

Con estas ideas nos han enseñado a justificar la violencia, el odio, los celos, el maltrato, se crece bajo la idea de que “quién bien te quiere, te hará sufrir”, “porque es la cruz que te tocó” y si hay un vínculo religioso es aún más difícil, porque se cree que no puede romperse, y el ciclo de la violencia se repite una y otra vez.

La consultora feminista Coral Herrera Gómez, radicada en Costa Rica, ha escrito artículos y libros sobre el tema del amor romántico y cómo estos mitos traen graves consecuencias para la vida de las mujeres, ella impartió una conferencia en la que explicó que el amor también es un tema político, porque no sólo se desarrolla en el ámbito privado, es un fenómeno colectivo que tiene una dimensión social y se va construyendo entre todas y todos con su diversidad.

El amor de pareja tiene que verse como algo público, porque cuando se registra la violencia se da en ambos espacios, y ahí es donde se tiene que hacer un trabajo colectivo, en la búsqueda de soluciones.

Cuando se registra un feminicidio o una violación, suelen justificarse con expresiones como “ella se lo buscó”, “andaba con “malas compañías”, “para qué se vestía así”, cuando esto es lo que tanto daño hace a las mujeres, y al contrario, se deben buscar soluciones reflexionadas y analizadas desde el ámbito colectivo.

Es por ello que debemos educar en igualdad, para que los hombres dejen de creer que tienen el poder de hacer con una mujer lo que quieran, para que reflexionen sobre la violencia que ejercen, porque les han hecho creer que hay una guerra de sexos y que las mujeres son sus enemigas y esto no es así.

Y el amor también es un tema económico, porque con las separaciones y de acuerdo con lo que establece la ley, los padres deben destinar el pago de pensiones alimenticias para la manutención de los hijos e hijas, y al aumentar el número de divorcios, se genera un impacto en la economía de las familias.

Para evitar las relaciones violentas debemos educar en una cultura de paz y respeto, convivir en igualdad, propiciar la comunicación, dejar de creer que somos propiedad de la pareja. Hay que aprender y desaprender, y esto no sólo debemos aplicarlo en las relaciones amorosas, también en las laborales, familiares y amistosas, para propiciar convivencias más armónicas.

Hay que aceptar que las relaciones cambian y que si no podemos vivir en pareja no se termina nuestra vida, conocernos y amarnos como personas nos hará estar mejor con lo que nos rodea. ¡Hay que amar más y sufrir menos!