Construcción ciudadana

  • Mujeres Que Saben Latín

Por Sheyla Fuertes Lara

El municipio de Xalapa tiene 5 congregaciones, la más alejada es Chiltoyac, que se encuentra aproximadamente a 50 minutos de esta capital. En dos de ellas por primera vez están al frente dos mujeres como agentas municipales, en la 6 de enero, Blanca Estrella Velázquez y en El Tronconal Edna María Hernández; quienes a pesar de diversos inconvenientes y el machismo que impera, ponen todo su empeño para realizar su función de la mejor manera.

Son dos mujeres interesadas en los temas de género y dispuestas a aprender para contar con las herramientas y en la medida de lo posible, mejorar las condiciones de vida en las que se encuentran las mujeres cercanas a ellas.

Y es que estas comunidades aunque están muy cerca de la zona urbana, siguen predominando las tradiciones, los estereotipos de género, la falta de acceso a una mejor educación, oportunidades laborales, que no les permite tener otras alternativas que las que han construido a lo largo de su vida, cargadas de prejuicios y temores para abrirse a nuevas ideas.

En estos lugares se registran casos de mujeres que sufren violencia física, sexual y psicológica, que aún creen que es parte de lo que les toca vivir como mujeres y no saben que esto un delito y que pueden denunciarlo.

Las familias siguen pensando que si a una hija la enamora un adulto y si se va con él con o sin su consentimiento, creen que a su regreso lo mejor que pueden hacer es casarlos, porque  la religión así lo establece, de lo contrario serán “mal vistas” por la sociedad.

Anteriormente, las y los menores de 18 años podían casarse con el consentimiento de sus padres, pero desde la reforma al Código Civil del Estado de Veracruz en el 2014, en el artículo 86, se estableció que no pueden contraer matrimonio hombre y mujer, antes de cumplir 18 años.

De acuerdo con la ley, cuando un hombre mayor de edad mantiene una relación con una mujer menor de 18 años, se considera delito de pederastia, esto de acuerdo a la reforma al Código Penal del Estado que se realizó en el 2010, en el que se impone una pena de seis a 30 años de prisión y multa de hasta tres mil días de salario.

El desconocimiento de la ley no sólo se presenta en la zona rural, la  urbana no se escapa. Las mujeres enfrentan diversos abusos de violencia y por el desconocimiento de las leyes no saben cómo enfrentarlos.

Creo que es importante que desde nuestros espacios difundamos esta información, las leyes y reglamentos con que cuenta el estado, para que las mujeres conozcan la Ley de Acceso de las Mujeres a Una Vida Libre de Violencia en donde vienen explicados los tipos y modalidades de violencia que son delito y que hay que denunciarlos.

Para construir ciudadanía es necesario que las autoridades difundan lo que hacen y en el caso de la población al informarnos, sabremos qué nos toca hacer para exigir nuestros derechos y que las instituciones hagan lo que les corresponde.

En nuestros hogares, debemos propiciar una mejor educación con las hijas e hijos, hay que formar estudiantes reflexivos, con capacidad de análisis, para que conozcan sus leyes y las apliquen en su cotidianeidad.

Las leyes en el estado ahí están, y para que no se conviertan en letra muerta debemos leerlas, informarnos, para exigir el respeto de nuestros derechos.

Busquemos información, elementos para ser mejores ciudadanos, ciudadanas, dejar de fomentar los estereotipos de género que  dañan a las mujeres y a los hombres. Hay que educar mejor, para que la niñez cuente con los conocimientos que les permitan tomar mejores decisiones, y dejar de lado el atraso y la desigualdad.