Nuevos espacios para el arte

  • Alma Espinosa

Las personas tenemos diversas formas de expresarnos. El arte es una de esas vías en que desde hace siglos utilizamos, ya sea desde el plano creativo o solo desde el observador. El arte siempre nos acompaña y nos genera una sensación de bienestar cuando está cerca.

La música es uno de las bellas artes que nos acompaña en un buen porcentaje de nuestras vidas. Algunas veces es solo compañía para hacer otras actividades y en otras tantas remedio para males del corazón y la cabeza.

En las últimas semanas, la ciudad de Xalapa fue sede de la expresión musical de bandas integradas en su mayoría por jóvenes veracruzanos. Músicos talentosísimos que con gran entusiasmo –sería arriesgado decir que todos, pero sí la gran mayoría– buscan espacios para expresarse y compartir el sentimiento hacia el arte y a la vida.

Ha sido la música el punto que ha reunido a grupos como Macuiles, Bolina sin Parné, Los Rurales, Guacamole, Soflama, Son de Madera, Los aguas aguas y Sonex en conciertos para solidarizarse con la familia del extraordinario músico Aleph Castañeda, quien falleció recientemente.

La solidaridad que han mostrado recientemente da un ejemplo a la sociedad veracruzana, no solo xalapeña, de lo que podemos lograr unidos. Debemos poner más atención a lo que hacen ellos, pues así como organizan un concierto conjunto a beneficio, se apoyan mutuamente en las presentaciones de sus discos; tal como sucedió recientemente en el Teatro del Estado, donde Sonex presentó su segundo disco titulado “Madre natura” y donde se dieron cita integrantes de las bandas antes mencionadas. El apoyo entre ellos también se manifestó posteriormente con mensajes de regocijo en las redes sociales.

Este es un buen indicio de que estamos venciendo poco a poco el espíritu individualista y egoísta que ha permeado por años y que mucho ha perjudicado a nuestra sociedad y no solo a la comunidad artística. Pareciera que los pequeños grupos de artistas que acaparaban espacios están perdiendo vigencia, y que la inercia de los recintos está desapareciendo.

La expresión humana a través del arte está ganando espacios y está invitando a las nuevas generaciones. Lugares como el Teatro del Estado está teniendo más actividades propias como la proyección de películas y la inclusión de conciertos de música veracruzana, gratuitos en su gran mayoría.

Es justamente el Teatro del Estado donde el son veracruzano ha estado retumbando en sus paredes. Han sido pocas las veces que este tipo de música ha sido protagonista del programa de mano. Es muy afortunado que ahora se le abra paso a la bellísima música tradicional de Veracruz, y tendrá aun mejor proyección cuando se realice en coordinación con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes un encuentro de son, donde estarán todas las agrupaciones que ya he mencionado y muchas más. Posteriormente serán ellos quienes nos representen en giras por todo el país.

La música no es el único arte que ha tenido una mayor apertura. La pintura y la escultura también son artes que han dejado de padecer un poco por falta de espacios. En los últimos años las Unidades de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) de la Universidad Veracruzana de Xalapa, como pionera, y posteriormente de Boca del Río, se han convertido en galerías con un público meta: los universitarios 

El lobby de cada USBI ha dejado de ser un gran espacio blanco y muy luminoso para convertirse en galerías de arte contemporáneo, donde se han presentado exposiciones nuevas y otras que han viajado por otros países. Tal es el caso de la exposición “Guardapelo”, del joven ceramista Abel Zavala, que ha llevado esta muestra a diversas galerías de distintos países del mundo y que actualmente se encuentra en la USBI de Boca del Río.

El cine como una forma de expresión más de las personas –que no estoy muy segura de llamarle séptimo arte porque se nutre de las otras artes– tiene nuevos espacios de proyección. Ya mencionaba el Teatro del Estado, también están los otros recintos del Instituto Veracruzano de la Cultura (IVEC), como el Recinto Sede, Casa Principal y Atarazanas en Veracruz; Museo Teodoro Cano en Papantla, y de Xalapa: la Galería de Arte Contemporáneo, el Ágora de la Ciudad y el Jardín de las Esculturas.

Hace apenas unos días llegó la Gira de documentales Ambulante, que celebra este año su décimo aniversario, y qué mejor que celebrarlo en la ciudad fuera del Distrito federal que reúne a más asistentes: Xalapa, con 10 mil personas, que hacen a Veracruz, específicamente a su capital, la segunda sede más fuerte y más afianzada para los organizadores. Cabe destacar que las proyecciones también se realizan en lugares públicos, como parques y plazas.

Así como hablo de estas formas de expresión del alma, podría continuar con las otras bellas artes. Sin embargo, las mencionadas son las que quizá están teniendo mayor presencia en la memoria colectiva. Queda hacer nuestra parte para que el terreno ganado en espacio y asistencia se conserve e incluso siga en aumento. No tenemos otra tarea más que la de apoyar asistiendo a los conciertos, presentaciones de libros, exposiciones y contribuyendo a conservar nuestras tradiciones.

¿Qué hacer en la semana?

¡Conocer las exposiciones que hay en todo el estado! Actualmente contamos con grandes exposiciones de pintura, escultura, cartel, fotografía, cerámica e intervención de piezas en los recintos del IVEC de las ciudades de Xalapa y Veracruz. Todas con entradas gratuitas.

La gira de documentales Ambulante continuará hasta el jueves 5 de marzo, con entradas gratuitas (excepto las que se proyectan en Cinépolis). Los documentales y cortometrajes emplean discursos diferentes de las películas que estamos acostumbrados a ver, por ello vale la pena conocer las propuestas y generar una opinión. El programa completo se puede consultar en www.ambulante.com.mx

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Alma Espinosa

Es originaria del Distrito Federal y desde hace más de una década radica en Xalapa. Es licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Estudió la especialidad en la Enseñanza de la lengua y la literatura en la Universidad Pedagógica Nacional Unidad Xalapa, donde actualmente es docente. Es egresada de la maestría en Literatura mexicana por la Universidad Veracruzana.

Actualmente cursa el diplomado para la Profesionalización de mediadores de lectura por la Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Xochimilco. Es mediadora del Programa Nacional Salas de Lectura del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. Ha impartido talleres relacionados con el tema de la lectura y la escritura, y desde hace dos años es una de las mediadoras que dirige la sala de lectura Equinoccios.

Como periodista ha trabajado en el Instituto Mexicano de la Radio, el periódico U2000. Crónica de la educación superior, y el Departamento de Prensa de la Universidad Veracruzana. Fue gestora cultural en la USBI Xalapa. Actualmente colabora en el área de Comunicación Social del Instituto Veracruzano de la Cultura.