Cuenta regresiva

  • J. Enrique Olivera

“Guerra sucia”

Corriendo la cuenta regresiva, el alcalde xalapeño se desentiende de la problemática más aguda que padece la capital veracruzana, evadiéndola y lavándose las manos dejando en manos de los gobiernos federal y estatal atención y y búsqueda de soluciones, por no ser de la competencia de la comuna una pronta y positiva respuesta.

Seguridad pública, movilidad y vialidad, infraestructura urbana, limpia pública, transporte público, ambulantaje y caos en tianguis y mercados, entre otros, percibiéndose por la población como problemas no resueltos y de urgente atención, son el escenario local que en unas cuantas semanas servirá de marco a “los mejores Juegos Centroamericanos y del Caribe”.

No hay suficientes recursos para paliar la situación, se insiste. Son más los problemas heredados y los que se acumulan en el presente, que la capacidad para hacerles frente con eficiencia y eficacia, pero si se cuenta con recursos de sobra para la promoción mediática de imagen del ya no tan joven Américo Zúñiga.

A falta de resultados relevantes, imagen mediática, es el camino que a sí mismo se ha trazado.

Estando ya el evento deportivo a la vuelta de la esquina, es curioso el hecho de la poca o prácticamente nula involucración y entusiasmo de la sociedad civil, en unos Juegos que no logran su propósito distractor de alejar de la mente de los xalapeños una problemática hoy por hoy insoluble que requiriendo respuestas integrales, no acepta más parches.

Todo mundo es consciente, menos la autoridad municipal, que el centro histórico de Xalapa, capital veracruzana, está diseñado para el tránsito de peatones y carretas, y no para un flujo vehicular de la magnitud que hoy registra la ciudad. El centro histórico, corazón de la capital siendo un verdadero nudo gordiano, colapsado afecta al resto de la mancha urbana. No obstante las recomendaciones de expertos extranjeros, movilidad y vialidad a lo largo y ancho del municipio exigen cirugía mayor y no más remedios caseros. En medio del desorden urbano, la inseguridad pública lejos de abatirse registra incrementos preocupantes, sustentado una percepción que deviene en malestar y protesta.

También se es consciente de que la comuna de Xalapa se encuentra entre la espada y la pared. Por un lado presionada por la opinión pública y, por el otro, la necesidad política de no contravenir lo que para un gobernador responsable de una administración pública estatal fallida, es prioridad mediática. Sin embargo, ello no justifica el pésimo desempeño de un alcalde que a sabiendas de las limitaciones a que se enfrentaría, prometió más de lo que hoy ofrece como resultados.

El tiempo se acorta, la cuenta regresiva se acelera y la capital veracruzana sin respuestas que satisfagan su calidad de sede de un evento deportivo de interés si no mundial, cuando menos sí para los países centroamericanos y del Caribe. Lástima, la oportunidad de cambio y transformación con la sola designación de la capital como sede del evento, se pierde en medio de la demagogia, la grilla electoral y el hartazgo ciudadano. Xalapa seguirá siendo la peor dotada como capital estatal en la región sur sureste del país. Y a otra cosa mariposa…

Hojas que se lleva el viento

Apenas el miércoles pasado comentamos que se percibe un enfrentamiento entre el México de siempre, y el que pretende construir el actual régimen a partir de las reformas “estructurales” aprobadas por el Congreso de la Unión a instancias presidenciales. Las últimas noticias en el ámbito nacional lo confirman; el campesinado con su abandono, atraso y permanente deterioro así como los pueblos originarios con sus usos y costumbres,  estorban en el pretendido paso a la próspera modernidad. 

No siendo suficiente el asistencialismo oficial -hoy bajo la denominación de “Prospera”- para saciarles su hambre y mantenerles al margen,  también en paralelo se recrudece la fórmula del viejo régimen priísta de represión y, su corolario, la satanización y criminalización mediática, de todo movimiento social contestatario que atente contra el pensamiento único a que invita el Sr. peña Nieto convocando a la concordia entre diferentes,  en torno a su proyecto de modelo de país.

La escalada de la guerra y la violencia institucional ya no tan silenciosa del régimen contra los pueblos originarios, contra los campesinos que defienden historia, tierra y territorio, así como contra los activistas que desde la clase media urbana se suman a la protesta y resistencia, está a la orden del día ocupando lugar destacado en la prensa no oficialista. Mexicanos enfrentados a otros mexicanos en pro y en contra de la modernidad neoliberal en un México contra México, en el marco del regreso del PRI a Los Pinos.

Si no ayudan no estorben, es la consigna con la que se pretende justificar una nueva etapa de guerra sucia en México, en la que a la exclusión y despojo material y espiritual del “nuevo régimen” contra los olvidados de siempre,  se suma la inseguridad pública creciente, en un país sin rumbo que transita al garete sin destino cierto.

-ooo-

Veracruz no necesita de la gendarmería nacional, con nuestros propios recursos basta para mantener el clima de seguridad y certeza jurídica que priva en la entidad, dice su gobernador a los veracruzanos. En este marco el secretario de seguridad pública valida el uso de palos y machetes para la autodefensa de la integridad física y bienes materiales de la población. Buen retorno a la edad de las cavernas en el Veracruz de aquí no pasa nada.

-ooo-

Ha llegado el momento en que el exceso de presencia en los medios ya ni perjudica ni beneficia a los senadores priístas en su intención de alcanzar la gubernatura de Veracruz. Identificados con la traición a México, fuera del círculo estrecho de la clase política profesional y texto servidores a modo que esperan la oportunidad de llevar agua a su molino, nadie los pela. Y menos si llaman a celebrar con alegría un aniversario más de la independencia de un México que no logrando romper las ignominiosas cadenas del subdesarrollo,  la sumisión y dependencia, vende hoy soberanía, territorio y recursos nacionales al mejor postor.- Cd. Caucel, Yuc., septiembre 16 de 2014.

 [email protected]

http://www.pulsocritico.com

http://pulsocritico.wordpress.com

Anteriores

J. Enrique Olivera

Como reportero laboró en los diarios, “Tiempo” y “El Imparcial de Xalapa”, del que fuera jefe de redacción. Fundando más tarde el boletín diario de noticias “Correo de la Noche” y la revista “Análisis”, en la capital veracruzana.  

Se incorporó a la Confederación Nacional Campesina, participando como delegado del CEN en el Plan Chontalpa, Tabasco. En el sector público federal prestó sus servicios como Sub residente de promoción social y económica de la Comisión del Grijalva en el Plan Balancán-Tenosique; Subdelegado de organización de la SRA en Quintana Roo y Yucatán; Supervisor técnico en el sureste del Fideicomiso de Organización y Capacitación campesina del BANRURAL; Jefe de la Unidad de Supervisión y control de la Delegación de la Secretaría de Programación y Presupuesto en Yucatán; Director de Evaluación Regional en la Subsecretaría de Evaluación de la SPP; Gerente del Banco Nacional Pesquero y Portuario para los estados de Yucatán y Quintana Roo; Delegado federal de Pesca en Quintana Roo; Responsable de promoción de proyectos productivos pesqueros, en la Comisión Intersecretarial para la atención de La Chontalpa y Región Lagunar del Estado de Tabasco. 

También se desempeñó como Jefe de la Unidad de Supervisión del Comité Promotor de Desarrollo de Yucatán, Director de Fomento Industrial en el gobierno del estado de Yucatán, y como Secretario Estatal de Pesca en el de Quintana Roo.

Retomando el periodismo actualmente edita el Semanario en línea Pulso crítico y como articulista independiente  sus colaboraciones se publican en diversos medios digitales en el internet.