La historia se puede enseñar así

  • Luisa Martínez Baxin
Con mapas mentales y uso de tecnología, los alumnos pueden meterse en el tiempo y vivirlo

Todo comenzó el 28 de octubre del 2015 cuando me entregaron la orden de presentación para laborar como docente de educación secundaria, realmente estaba muy nerviosa, pero muy emocionada. Inmediatamente me retiré de la SEV para dirigirme a mi nueva institución educativa, a la secundaria técnica industrial número 97 de la ciudad de Xalapa.

De pronto observé risas, comida, arreglos por doquier estaban festejando el día de muertos, los principales personajes eran mis futuros alumnos, padres de familia, docentes y prefectos.

Mientras esperaba a que se desocupara el director de la escuela para mostrarle mi orden de presentación alcanzaba a percibir un aroma exquisito del tamal de hoja de maíz que se prepara año con año en Veracruz para celebrar Todos Santos. Además de ver a varios jóvenes vestidos de catrinas y las paredes de la escuela tapizadas con calaveras dedicadas a unos maestros.

Recuerdo muy bien ese día, estaba tan contenta de estar ahí y conocer mi nuevo espacio de trabajo. Después de esperar un momento me atendió el coordinador de la escuela para darme el horario y los grupos. La asignatura a impartir era historia de México e Historia universal, segundo y tercer año.

Posterior a ello, me recibió el director de la escuela quien se alegró cuando le dije qué materia impartiría puesto que en su opinión los jóvenes necesitan saber un poco más de la historia de su país, dar una clase con entusiasmo, además mencionó: Le doy un punto a favor a la reforma educativa emanada del gobierno de Peña Nieto, de mandar maestros jóvenes que tanta falta le hacen al país. ¡Recuerdo mucho eso!

Una experiencia que me pareció significativa fue cuando me presentaron ante los alumnos, nunca olvidaré sus rostros, de asombro, inquietud, curiosidad y admiración puesto que tendrían una maestra joven.

Fue un reto para mí debido a que los estudiantes estaban sin maestro y ya llevaban semanas así, además estaban acostumbrados a trabajar a un ritmo diferente.  Al llegar a la institución se establecieron los acuerdos que estarían en el salón de clases, así como la forma de trabajar la cual procuré fuera innovadora para ellos.

Me interesaba conocerlos, saber qué pensaban acerca de la materia, qué les gustaba, necesitaba tener información que facilitara el ambiente de trabajo en el aula, además porque impartiría clases en el turno vespertino y los estudiantes son más dinámicos e inquietos. De esa manera utilice unas preguntas: ¿Te gusta la materia de historia? ¿Por qué te gusta? ¿Cómo te gustaría que te enseñaran esta asignatura?

Las respuestas no fueron muy favorables para mí, aunque estaba segura de lo que contestarían. La mayoría dijo que no le gustaba la historia porque la consideraban una materia aburrida, tediosa y que siempre tienes que aprenderte las fechas y los personajes, otros escribieron que era el pasado y no tenía sentido. Asimismo anotaron la forma en cómo les enseñaron en la primaria, a través de líneas del tiempo y resúmenes y casi siempre hacían lo mismo.

Otros alumnos expresaron que les gustaría les enseñaran una historia divertida y atractiva con películas, documentales y trabajos que llamaran su atención. El reto fue muy grande, tenía mucho que hacer.

Por lo cual busqué estrategias y dinámicas de trabajo distinto a lo que realizaban, y procuré dar una historia con énfasis, con actitud y motivar a los alumnos al conocimiento del pasado, sin una historia aburrida, y solo de líneas del tiempo.

Conforme avanzaba los meses mi objetivo se centró en explicar con entusiasmo cada hecho y proceso, siempre observaba el rostro de mis alumnos, las miradas atentas  a lo que decía. Ahí estaban escuchando cada suceso, intentaba narrarlo con si estuviéramos en el tiempo.

Sus trabajos ya no serían elaborar muchas líneas del tiempo, sino más bien mapas mentales, cognitivos y semánticos complementando con documentales, películas, exposiciones y maquetas. Transcurría el tiempo y observa el interés de los jóvenes por trabajar, participar cuestionar y entregar sus actividades de forma detallada ya que desde un principio se procuró fomentar en ellos el uso de material reciclado en sus trabajos así como hojas blancas y de colores para realizar sus esquemas.

De esa manera cambiaron actitudes y formas de pensar, la visión es otra acerca de la asignatura, se interesan más y gustan por trabajar en equipo. El trabajo también se reflejó en apoyarlos en su proceso educativo, escucharlos y orientarlos ante cualquier duda que surgiera.

Esas estrategias permitieron generar un clima de confianza, respeto y comunicación con mis alumnos, elementos que favorecieron en su aprendizaje. Ingresar como docente ha sido un trabajo enorme, planear, elaborar y diseñar actividades atractivas para los jóvenes no es tarea fácil, y menos para el historiador puesto que no estudié en una Normal para maestros, y realmente se complica un poco más pero conforme avanzan los días y los meses te das cuenta que puedes hacer las cosas.

En esta sociedad existe una variedad de elementos que pueden aplicarse en la práctica docente, un ejemplo claro es el uso de la tecnología. Mis alumnos están día con día con el celular o en las redes sociales y otra alternativa de trabajo es esto, debido a que son ellos los que están cuestionando o preguntando.

Últimamente con el grupo de tercer año, grupo L, se realizó una actividad que a los alumnos les gustó mucho, la elaboración de un lapbook. Trabajo que se puede hacer con material reciclado, cartulina o cartoncillo. De esa manera para concluir el bloque 5, los jóvenes debían escoger un presidente de la república con una temporalidad de 1980 hasta 2012. Del cual tenían que investigar los aspectos políticos, económicos, culturales y sociales de la época, y anotar las ideas principales en el lapbook que es como una carpeta tamaño oficio con muchas divisiones y un poco más grande.

Con la finalidad de fomentar el uso de la tecnología y llamar su atención por la materia se hizo hincapié en crear una cuenta de google y hacer un blog para que subieran sus trabajos y comentaran sus actividades, también con el objetivo de retroalimentar su aprendizaje. Puesto que durante el ciclo escolar en historia de México se analizaron algunos  presidentes, lo cual se explicó con ejercicios, así como en la elaboración de mapas cognitivos. Se discutió la biografía de Carlos Salinas de Gortari, de Ernesto Zedillo así como de Felipe Calderón Hinojosa, asimismo cada alumno subió su actividad al blog para comentar y tener otra idea sobre cómo trabajar en la materia.

Estoy por cumplir dos años como docente, es una práctica muy atractiva pero con muchos retos, te presentan muchos cursos a los que cual tienes que asistir por formar parte de la nueva reforma educativa con la cual estoy de acuerdo en algunas cosas porque es importante actualizarse y prepararse, aún tengo que mejorar más, seguir innovando y encontrar estrategias agradables para mis alumnos, aún hay mucho por hacer.

El reto continúa, la preparación como docente en la enseñanza de la historia en educación secundaria no para... y yo ahí seguiré.