Javier Duarte debe ser juzgado: María Elena Morera

  • Mussio Cárdenas Arellano

* Sus policías son “delincuentes con placa”  * Mandos y tropa, reprobados  * “En Veracruz gobierna el crimen organizado”: Wallace  * Escándalo sexual contra crítico de la SSP  * Luis Fajardo responsabiliza a Duarte, Bermúdez y “Culín”  * Hay que despertar a Héctor Yunes  * IPAX: la secre del comisionado y sus 40 mil  * Aroldo Fuentes no paga  * Maryjose será candidata del PAN-PRD

Con la venia de Javier Duarte, el aval de Arturo Bermúdez, policías pillos capacitan, enseñan, adiestran, acreditan a policías pillos. Son “delincuentes con placa”, que van por las calles atracando, levantando, entregadas sus víctimas al crimen organizado

Retrata María Elena Morera al gobernador de Veracruz, oscura y en las sombras la seguridad, sin resultado alguno. O sí. Disponen de la vida de la gente inocente, como en Tierra Blanca, remitidos a la delincuencia y de ahí a la muerte.

Destaza la presidenta de Causa en Común, una de las organizaciones no gubernamentales de mayor peso y solvencia moral, a Javier Duarte, su caos hasta convertir a Veracruz en un infierno, aniquilada la seguridad pues resultan ser tan o más pillos los policías que aquellos a los que deben aprehender.

Cita cifras: el 37 por ciento de los mandos están reprobados; el 22 por ciento de la tropa está reprobada. Son cifras que se desprenden del reporte del 31 de enero de 2016 del Consejo Nacional de Seguridad Pública.

“Están sacando cadetes de la Academia con las horas que marca la ley. Pero por el otro lado tenemos policías que son unos delincuentes completos y que no los quitan. Lo que vimos que sucedió en Tierra Blanca fue por eso”, explica.

Esa es la policía duartista. Y por ahí va la Fiscalía General de Veracruz. El 10 por ciento de los mandos reprobó; el 16 por ciento de los elementos armados, reprobó los exámenes de control de confianza.

“Son delincuentes con placa y lamentablemente la mayor parte sigue en funciones”, sostiene María Elena Morera en el portal Al Calor Político.

“Es tan grave el hecho —agrega—, que son criminales con placa y el estado es el que falla. Con un secretario de Seguridad Pública que se burla de los ciudadanos al hacer esto y un procurador (fiscal) que se burla al no atender las demandas de justicia”.

Cuestiona la ética de Javier Duarte y sus capos:

“Es una falta de ética del gobernador, del secretario de Seguridad y del procurador” sostener policías con tendencias delictivas en las corporaciones.

Ni por error puede ser simplista la crisis de inseguridad. No son los Frutsis y los Gansitos el objetivo de la delincuencia. No es esa visión limitada, la de Javier Duarte, la que confrontan los veracruzanos. El baño de sangre es visión de todos los días, que provoca miedo, que zarandea a la sociedad.

María Elena Morera describe el problema en su esencia: Veracruz tiene la peor policía del país, superando a Sinaloa, cuna del narco.

De ahí que diga que Arturo Bermúdez Zurita, el “general” postizo que funge como secretario de Seguridad, permite que “delincuentes con placa” anden en las calles.

Alerta sobre la pasividad del gobierno federal, ajeno a la ola de sangre, al creciente secuestro —en Minatitlán, tres médicos en siete días—, al incremento de las ejecuciones en la vía pública, al levantón de jóvenes a manos de la policía estatal y su entrega a manos del crimen organizado.

Veracruz y los estados aledaños son una “bomba de tiempo”, refiere la presidenta de Causa en Común.

Depurar la policía también es otra falacia. No los envían a la delincuencia; ya son delincuentes. “Si los despiden no los envían a la delincuencia, ya eran delincuentes, sólo que les pagaban un sueldo. Ellos mismos formaron a esos policías. Hacer un seguimiento sería atraparlos antes que después”.

Su escuela del crimen es la Academia El Lencero. Eso no lo dice María Elena Morera. Ahí aprenden tortura. Ahí reprimen. Ahí se alecciona para salir a actuar en contra de la ley.

Retomando a la presidenta de Causa en Común, su frase es contundente: Javier Duarte debe ser llamado a cuentas. “Debe ser juzgado por todo lo que ha pasado, o bien, creo que se acerca el momento en que deba irse, tal como ocurrió en Michoacán o en Guerrero”.

De ahí la fobia del gordobés contra María Elena Morera. De ahí que no quiera que se involucre en el caso Porkys de Costa de Oro, cuatro violadores a los que se niega a encarar el fiscal Luis Ángel Bravo. De ahí que invoque que es irresponsable opinar sin tener acceso al expediente.

Expresa María Elena Morera que Causa en Común suscribe acuerdos con los candidatos a un gobierno estatal, y que en el caso Veracruz “espero que se haga una investigación sobre esta administración porque definitivamente hay responsables en Seguridad Pública, en la Procuraduría y el gobernador”.

Otra mujer lo fustiga. Es Isabel Miranda de Wallace, activista, defensora de derechos humanos, presidenta de la organización Alto al Secuestro.

“Javier Duarte siempre ha sabido que su policía está con el crimen organizado”, difunde Plumas Libres.

Debe Javier Duarte rendir cuentas ante la justicia en algún tribunal, abunda, por la impunidad a la que se acogen los delincuentes, por la corrupción, por los desaparecidos, por los ejecutados, por los secuestrados.

Veracruz está en la mira internacional, con sus consecuencias para la entidad, agrega.

Le indigna el secuestro de Claudia Vera, activista que pugnaba por las acciones pudieran dar con el paradero con vida de los cinco jóvenes de Playa Vicente levantados en Tierra Blanca, el 11 de enero. Claudia Vera fue plagiada por un comando armado en Boca del Río.

“En Veracruz cada día están peor las cosas por la incapacidad del gobernador de gobernar”, expresa. Y luego suelta: “Ahí quien realmente gobierna es el crimen organizado indudablemente. Ellos son quienes ponen las leyes, tan es así que se atreven a levantar en pleno puerto a una mujer y a cualquier persona. Esto habla de la gran impunidad que existe y la poca capacidad de acción y reacción que tiene el gobierno de Veracruz”.

Mala fórmula la de Javier Duarte. Los policías pillos de la Academia preparan a los policías pillos que integran la tropa. El 37 por ciento de los mandos reprueban los exámenes de control de confianza y el 22 por ciento de los policías de a pie también.

Y una vez en funciones, les dan placa y los envían a delinquir.

Y así Veracruz se convierte en la entidad con la peor policía del país.

Y así se supera a Sinaloa, la cuna del narco.

No dijo cuándo, pero Javier Duarte abdicó.

A Veracruz, en realidad, lo gobierna el crimen organizado.

Archivo muerto

Golpe hueco a Luis Fajardo. Difunden imágenes con contenido sexual, escandalizan en las redes sociales, distribuyen discos CDR con la leyenda “El Porky de Coatzacoalcos”, reparten volantes y se lanzan a replicar personajes vinculados con la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz. Horas antes, Luis Fajardo Jiménez hablaba en el foro sobre seguridad, convocado por el candidato del PAN-PRD al microgobierno de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, y exponía el caos, los delitos devorando al sistema policíaco, sembrando miedo en la sociedad. Luego vino la embestida. Ahora les responde el presidente del Observatorio Ciudadano de Coatzacoalcos con una exhibida de antología. Replica Luis Fajardo en Facebook: “He entregado mi vida a proponer iniciativas en favor de la ciudadanía veracruzana desde la perspectiva de la sociedad civil. Recientemente señalé la gravedad en materia de secuestros que vive nuestro Estado y particularmente el sur, esto sin dejar de ver el gran número de homicidios dolosos, cifras que a pesar de que la autoridad hace lo imposible por ocultar están a la vista de todos los ciudadanos.

El día de hoy he sido víctima de señalamientos a mi persona, mismos que hacen referencia a situaciones que nada tienen que ver con mi actuar profesional sino con mi vida privada, en diferentes puntos donde realizo mis actividades he recibido papeles y objetos señalando amenazas directas a mi integridad física y a la de mi familia, llamadas telefónicas de números desconocidos con amenazas de muerte y no solo a mí sino hacia los integrantes de mi familia e incluso a integrantes de mi equipo de trabajo. Ante lo expuesto líneas arriba hago responsables a Javier Duarte de Ochoa, Arturo Bermúdez Zurita, Luis Ángel Bravo Contreras, José Nabor Nava Olguín, Federico Rivas Valdés y a los integrantes del equipo de trabajo de Héctor Yunes Landa quien aspira a gobernar Veracruz y que se ha rodeado de personas que han trabajado para la actual administración estatal, de cualquier daño a mi vida y a la integridad de mi persona y de mi familia. Este cobarde acto de intimidación no impedirá que siga haciendo mi trabajo para dar a conocer lo que sigue ocurriendo en Coatzacoalcos y en todo el estado de Veracruz”. Y los aplacó… Tilín, tilín. Hay que sacudir a Héctor Yunes. Iniciaron las campañas y el candidato del PRI no suena, no despega, no inquieta ni emociona, no preocupa ni alienta. Lo que dice se pierde. Lo que ofrece se esfuma. Tres días y no aterriza mientras todo Veracruz habla de la denuncia penal del candidato del PAN-PRD al microgobierno de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, contra Javier Duarte por enriquecimiento ilícito, vía una red de casi 40 prestanombres, casas en México, Estados Unidos y España, tres mil millones de pesos desviados de las arcas públicas. Y otra parte de la opinión pública se concentra el escándalo Panamá Papers, la investigación periodística internacional que implica Omar Yunes en un intento de creación, no concretado, de un fideicomiso en Nueva Zelanda para evadir impuestos. Replica Yunes azul, replica su hijo, diciendo que se trata de otro Omar Yunes, que no hay desvío alguno y envía el joven empresario una carta a la revista Proceso en que refuta la publicación y que se haya difundido la fotografía donde aparecen él, su esposa y su hijo. ¿Y Héctor Yunes? Ofrece empleo, más obra pública; trae a su lado a Sonia Sánchez de Chirinos —¿o ex de Chirinos?—, a quien prácticamente nadie conoce y otros la recuerdan en sus tiempos universitarios, en el convertible del profesor Adán, en Xalapa, o la mega adquisición priista: Marcos López Mora, ex alcalde de Poza Rica, gutierrezbarrista, igualmente desconocido para los electores de hoy. Tilín, tilín. Hay que despertar a Héctor Yunes. Esto ya empezó… Muy mona la secre del comisionado del IPAX, Erika Castillo Salas. Y más mona con sus 40 mil pesos mensuales, lo que no gana ni el más bragado de los policías de calle, los que con su vida resguardan inmuebles particulares y oficinas públicas. Erika es una reinita de palacio, poderosa como ninguna, brazo derecho y mano ejecutora del comisionado-coladera, Fernando González Ortiz, célebre por la filtración de las fichas de control con que se dio de alta a los hermanos y padre de Héctor Yunes Landa en la Policía Auxiliar y Protección Patrimonial, así como al sobrino Jesús Yunes García, alias “Chuchín”, en el área gerencial, y por el documento que desploma la versión exculpatoria del candidato del PRI —“No me han acusado de nada y se trata de un señalamiento perverso”— que acredita que los tres parientes era “escoltas del senador”, cargo que en ese entonces tenía Héctor Yunes. Erika Castillo manda en el IPAX. Erika Castillo tiene a su hermana Berenice en un puesto clave: control de nóminas. Ahí está el ejército de ”aviadores” del comisionado, notarios, empresarios, la juez Edith Maribel Flores Lopez, “mujer del muerto Zaleta (Edmundo Martínez Zaleta, ex líder del PRI y operador hectoryunista)”. Berenice Castillo gana 18 mil pesos al mes. Otras cuatro secretarias, reinitas también, perciben algo similar… Se llama Aroldo Fuentes Fajardo y tiene por lo menos cuatro empresas solventes, entre ellas Fumuji Construcciones, S.A. de C.V. Aún así, Aroldo no paga. Le debe a varios proveedores que un día creyeron que era hombre de bien. Rehuye sus compromisos pese a los jugosos contratos por casi 100 millones de pesos que le otorga Pemex. Aroldo Fuentes quiere destacar, se abre paso hacia las cámaras comerciales y de la construcción, pero está al borde de una denuncia por fraude… Agravios, infamia, el odio de los duartistas, la bajeza y la inmundicia verbal. Todo aguantó Maryjose Gamboa Torales cuando su caso quedó congelado, en ascuas su candidatura a diputada federal por la coalición PAN-PRD en el distrito Veracruz Urbano. Este martes 5 la incógnita se despejó. El CEN panista refrendó su nominación, basado en la intención de voto a su favor, las encuestas ubicándola en primerísimo lugar. Una más que le gana la periodista, autora de Al Aire, su columna que se publica a diario en Notiver, a Javier Duarte, quien usó a sus enclaves en las filas del PAN para cuestionar su candidatura. Ni los rufianes que la siguen, que amagan con levantarla, que una noche reciente la asediaron al salir de misa, su hija María Paula de su mano, camino al hogar de sus padres, han podido doblegar el acero de que está hecha Maryjose. A cada golpe responde con mayor entereza. Al odio declarado de Javier Duarte le aplica dignidad. Con eso basta. Será la candidata de la coalición PAN-PRD “Unidos para Rescatar a Veracruz” en el distrito Urbano del puerto jarocho y con toda seguridad será su diputada en el Congreso estatal. Tiene un altísimo respaldo social…

[email protected]

[email protected]

www.mussiocardenas.com