Revive el fuego historia del Palacio Municipal

  • Jorge A. González

Los porteños amanecimos con la noticia de que el Palacio Municipal de Veracruz fue presa del fuego en las primeras horas de la madrugada.

Hasta entonces no existe ningún peritaje formal de las causas del incendio, lo que ha dado paso a las especulaciones.

El comentario que  más prevalece en medios e internet es que fue un hecho provocado, que dos sujetos huyeron después de que las flamas se intensificaran.

No obstante, la arquitectura del inmueble tiene todos los elementos necesarios  para una simple chispa derive en una rápida combustión.

Hasta entonces, de acuerdo con reportes del Heroico Cuerpo de Bomberos de Veracruz el punto de ignición se originó en la oficina de Turismo, en el extremo derecho.

La corporación informó que tardó 40 minutos para detener las llamaradas que dejaron buena parte de la fachada en muy malas condiciones.

CONSTRUCCICÓN Y MODIFICACIÓN

La edificación de lo que hoy conocemos como Palacio Municipal se levantó para albergar a las Casas del Cabildo en el año de 1609 y quedó terminado en el 1627.

El inmueble tuvo diversas intervenciones, una ampliación en 1776. En 1914, luego de los siete meses de ocupación por parte de las fuerzas invasoras norteamericanas en el año de 1914, el edificio quedó en el total abandono.

Para 1934, el Presidente Municipal de Veracruz Santos Pérez Abascal rescató el edificio, el cual estuvo a punto de ser demolido.

Su última modificación se registró en 1969, con el aniversario 450 de la fundación de la ciudad, que es el anexo en la parte posterior, considerado ya como una construcción moderna.

ARQUITECTURA

La sede del ayuntamiento de Veracruz conserva un estilo arquitectónico general de estilo barroco muy sobrio.

Por fuera, podemos apreciar  su hermosa torre ubicada en su extremo izquierdo del conjunto.

Los cronistas aseguran que dicha torre era usada para vigilar a los barcos que llegaban a Puerto.

Sin duda, otro de los aspectos de la arquitectura es el magnífico patio interior con sus amplias arquerías.

Hasta la fecha es catalogado por algunos historiadores y arquitectos como uno de los inmuebles de La Colonia mejor conservados y bellos de la ciudad.

Durante su historia fue protagonista en las tres invasiones que ha sufrido el Puerto, dos por las tropas estadunidenses y una por los franceses en la llamada “Guerra de Los Pasteles”.

SEDE DE GOBIERNO

Además de su importancia desde el patrimonio tangible, Palacio Municipal de Veracruz fue sede de la Capital de la República, la primera de ellas en 1859 en la era del ex presidente de México Benito Juárez García, y la segunda de ella, en 1915 bajo la presidencia de Venustiano Carranza.

Antes de que se le concediera el título de ciudad a la anterior población en la antigua Veracruz, las construcciones eran de madera, por tal razón se le llamó “Ciudad de Tablas”.

Esa característica ponía en riesgo a la población porque los accidentes con el fuego estaban a la orden del día, y las viviendas eran reducidas a cenizas.

Desde la nueva fundación la ciudad, la población se extendió ya con construcciones de cal y canto, y edificios mayores con la piedra extraída del mar y conocida como piedra múcara.

OBLIGACIONES DEL INAH

La historia se repitió la madrugada de este miércoles, pues la parte antigua del palacio aún conserva diversos elementos de madera como vigas, puertas, techos y espacios forrados con madera, como el Antiguo Cabildo y la Sala de Juntas.

Además del peritaje que deba hacer el Cuerpo de Bomberos, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) debe hacer el suyo para evaluar los daños y presupuestar el costo de rehabilitación –al estar el edificio- dentro del Catálogo de Edificios Históricos.

El INHA está obligado a elaborar el proyecto de restauración, lo que aún no está claro es quien costeará tal restauración. Se sabe que algunos monumentos históricos están asegurados por el Instituto, de no ser así, la inversión tendrá que salir de la partida municipal y federal destinada para la Dirección del Centro Histórico Municipal, aunque también cabe destacar que existe un Fideicomiso para el rescate del Centro Histórico en el que se supone, hay recursos estatales y federales.