Tehuipango, Ver.- Las acusaciones contra el sacerdote Lidio Limón López continúan. Ahora, habitantes aseguran que utiliza a los catequistas para incitar a la violencia y dividir a las familias. Y consideran que la intervención de la Diócesis para terminar con el conflicto iniciado a partir del supuesto robo de la espada en la figura del patrono “Santiago Apóstol”, fue “tibia” y no solucionó el problema.

Por este problema ya hay familias que están divididas, porque unos están a favor del padre y otros en contra, dice Pedro Chipahua representante de un grupo de habitantes. Y por si eso fuera poco, el alcalde parece estar acentuando la división, y la inconformidad en contra del sacerdote”.

Avc